El Real Madrid realizó un arranque de partido espléndido en la final de la Supercopa de España ante el Barça en Riad. Un doblete de Vinicius en apenas diez minutos dejaron muy encaminada la copa para el conjunto de Carlo Ancelotti. Tras esos dos tantos, el partido se calmó y los azulgranas buscaron reengancharse al encuentro con posesiones largas de balón, buscando mover a una defensa blanca que estaba muy bien plantada sobre el césped del Al Awwal. Un gran remate de Robert Lewandowski desde la frontal del área acortó las distancias en la final de la Supercopa de España y eso hizo que los azulgranas creyeran en una hipotética remontada antes de que se llegase incluso al tiempo de descanso. Sin embargo, cuando mejor estaban los blaugranas, Ronald Araujo cometió un penalti sobre Vinicius que él mismo se encargó de anotar, pese a que Iñaki Peña llegó a adivinar la trayectoria del lanzamiento. La pena máxima fue muy protestada por todo el banquillo y jugadores del Barça, ya que consideraron que el agarrón de Araujo a Vinicius fue muy sutil y no fue suficiente para señalar la pena máxima. En «Carrusel Deportivo», Iturralde González aseguró que para él no es suficiente para decretar el penalti, pero no se trata de una acción de VAR porque hay contacto entre el central uruguayo y el delantero brasileño. «No hay disputa de balón y si el árbitro llega a creer que no hay disputa de balón de Ronald Araujo con Vinicius tendría que ser cartulina roja para el uruguayo. Si pitas penalti y crees que puede rematar Vinicius, es tarjeta roja», argumentó el analista arbitral. «El árbitro pita penalti por agarrón de Araujo, viendo su lenguaje corporal. Por partes, ese brazo por encima del hombro no es suficiente para pitar penalti, pero yo no tengo una verdad absoluta para este tipo de jugadas. Son jugadas para que vea la gente lo difícil que es arbitrar porque puedes interpretar que es penalti o que no lo es. En lo que no estoy de acuerdo es que, cuando has decidido pitar el penalti, si es agarrón, tiene que ser tarjeta roja porque es una oportunidad manifiesta de gol. Yo no pitaría penalti, pero si lo pitas, me voy más a la roja que a la amarilla».