Francia y Alemania se enfrentan por el acuerdo con Mercosur que rechazan los agricultores en sus protestas

La unanimidad que finalmente han alcanzado los 27 en el Consejo Europeo a la hora de liberar miles de millones de ayuda para Ucrania brilla por su ausencia en lo referente a la respuesta a algunas de las exigencias de los agricultores que protestan en varios países europeos. Los trabajadores del campo critican que no haya restricciones a la importación de productos procedentes de Ucrania, decisión que va a seguir vigente durante este 2024, así como se oponen un futuro acuerdo comercial con los países que conforman el Mercosur. «El acuerdo con Mercosur es inaceptable para la mayoría de los agricultores de la UE. En este momento, un impulso continuo para lograr que el acuerdo se cumpla será percibido como una nueva provocación por parte de la comunidad agrícola» avisaban ya en una carta conjunta que el comité de cooperativas agrarias ha enviado esta semana a la presidencia de la Comisión. Y esa postura es la misma que defiende Francia. El gobierno galo rechaza la competencia que puede suponer ese acuerdo comercial y este jueves el primer ministro Gabriel Attal ha vuelto a insistir en que su negativa a ese pacto es total. A la posición de Francia se ha sumado Irlanda, cuyo primer ministro Leo Varadkar se ha referido a esas negociaciones con los países latinoamericanos al llegar a la cumbre en Bruselas. Para el dirigente irlandés, no tiene mucho sentido establecer recortes a los agricultores europeos y, al mismo tiempo, intentar llegar a acuerdos comerciales con terceros países que no cumplen con las mismas regulaciones medioambientales que se exigen a los jornaleros europeos. En el otro lado de la mesa se sitúa Alemania, cuyo canciller Olaf Scholz se ha convertido en el principal defensor del acuerdo con Mercosur a pesar de que también su país ha sido escenario de protestas del sector agrícola. Scholz ha insistido en su comparecencia posterior a la reunión del Consejo Europeo en que espera que ese pacto se alcance lo antes posible. Scholz ha lamentado que el acuerdo avance con lentitud y argumenta que todos los países de la Unión estuvieron de acuerdo en llevar a cabo estas negociaciones para un pacto aunque después se puedan introducir matices antes de aprobarlo. Y el canciller tiene sus motivos para esta defensa constante de una posición enfrentada a la de Francia, como el hecho de que Alemania es el principal socio comercial en Europa de Brasil y de Argentina. El acuerdo con Mercosur estuvo ya en la agenda de la presidencia de turno de España durante el pasado semestre, pero no se logró alcanzar un acuerdo. De hecho, los presidentes de Brasil o de Argentina denunciaron que habían detectado posiciones proteccionistas por parte de Europa, sobre todo del gobierno francés.

Francia y Alemania se enfrentan por el acuerdo con Mercosur que rechazan los agricultores en sus protestas

El gobierno galo suma el respaldo de Irlanda a su rechazo al pacto comercial con varios países latinoamericanos, mientras que Berlín encabeza el respaldo al acuerdo

Antonio Martín

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