"Nos hemos resignado a que los demás nos pongan una etiqueta": Roberto Sánchez reflexiona sobre las heridas abiertas en Cataluña tras el 'procés' en su nueva novela

“Barcelona, principios de 2023”. Un periodista y escritor vuelve a Barcelona después de los años del 'procés' y allí descubre que el padre de su gran amor ha fallecido. El nombre de este periodista que protagoniza la novela 'Líneas Cruzadas', es Ricardo Santos, el cual comparte, además de las iniciales, algunos datos biográficos con su creador, Roberto Sánchez.

Otro de los atractivos del libro es la novedad que contiene la banda sonora con la que el autor ha decidido acompañar la historia. U2, Pink Floyd, Elvis o Simple Minds son algunos de los autores que el lector puede escuchar mientras sigue las peripecias de Ricardo. "La banda sonora estaba casi antes que la novela", ha confesado el escritor, que de hecho ha dejado un código QR al final del libro para poder acceder a las canciones que se han ido mencionando.

Llama también mucho la atención en la novela la época y el lugar en el que se ambientan: una Cataluña metida de lleno en la disputa por la independencia. Una decisión que fue tomada "por la edad de los protagonistas" y porque Sánchez tenía claro que los hechos ocurrieran en Barcelona. "Obviar el 'procés' me era muy difícil, por lo tanto ya me metí de lleno".

Así, imágenes tan características de esa época como los coches de policía con los cristales rotos no solo son visibles en la trama, sino que llegan a jugar un papel en ella. "Me gusta mucho jugar con las ucronías", ha confesado el periodista al comentar algunos de los detalles de la trama que "no está demostrado que ocurrieran", pues "tampoco está demostrado lo contrario".

En ese contexto también era inevitable compartir su propia experiencia como catalán, aunque el autor ha destacado el hecho de que él lo vivió "desde fuera", es decir, "ni tan cercano ni tan vivo como se produce en la familia de mi protagonista", ya que su residencia estaba en Madrid durante esos años. Aún así, Sánchez ha recalcado que "casi todos los que hemos pasado por Cataluña conocemos a alguien" que haya pasado por alguna experiencia similar.

Algo que sí vivió el periodista, y de lleno, fue la lluvia de críticas que le cayeron, desde todos los frentes, cuando en alguna ocasión dio su opinión sobre el temas. "Nos hemos tenido que resignar a que los demás nos pongan una etiqueta", ha reflexionado, para luego asegurar que el papel de equidistante es, precisamente, lo que su personaje se niega a aceptar.

Este tipo de cuestiones son las que más han crispado el ánimo en Cataluña, incluso en el seno de muchas familias. "Esta novela la escribo en un momento en el que veo que aquello que había conseguido como gran patrimonio la sociedad catalana", ha confesado en relación a la convivencia ideológica, "estaba a punto de romperse". Esto es algo que, a la larga, le ha dejado con mal sabor de boca, puesto que en algunas presentaciones del libro habló con personas que, aunque fuera solo con la mirada, le transmitían un punto de vista opuesto: "Era como si me dijesen 'Tú eres muy optimista. Eso ya se ha roto'".

No obstante, frente a ese escepticismo, o precisamente a propósito del mismo, Roberto Sánchez ofrece una obra plagada de amor, de infancia, de misterio. Y también, por supuesto, de humor. "Aunque estemos en el ojo del huracán", ha concluido, "si no nos salva el humor, no nos salvará nada".