Abejas, lluvia en el desierto y ahora esto: esta cara se le queda a Alcaraz tras una inesperada interrupción en rueda de prensa
El tenista murciano se impuso a Daniil Medvedev en dos sets para revalidar el título de Indian Wells
Carlos Alcaraz ha completado una semana de un tenis a un altísimo nivel para revalidar el título de Indian Wells. En una final en la que fue muy superior a Daniil Medvedev, el murciano alzó su segundo título norteamericano con tan solo veinte años. Además, lo hizo en una semana en la que las circunstancias externas no parecieron ayudarle demasiado. En primer lugar, una plaga de abejas obligó a parar su partido de cuartos de final contra Alexander Zverev hasta que estas fueron eliminadas de la pista central. En semifinales, contra Sinner, el partido se paró durante tres horas por una inesperada lluvia en mitad del desierto de California.
Aunque la final transcurrió con total naturalidad, Carlos Alcaraz vivió un nuevo contratiempo en sus propias carnes. En rueda de prensa, y mientras escuchaba una pregunta, una alarma antiincendios sonó en toda la sala para la sorpresa de los allí presentes. "Ha ocurrido una emergencia", comenzaba diciendo el mensaje que hizo que todo el mundo que se quedara en el más absoluto silencio. Aunque el murciano no entendió nada al principio y su gesto era muy contrariado, rápidamente entendió que se trataba de un error y no pudo aguantarse la risa.
"Imagino que es por mi fuego en la pista", dijo un Alcaraz muy sonriente antes de esperar a que el mensaje se callara para poder seguir con la rueda de prensa. "Primero las abejas y ahora esto", continuó diciendo entre risas. Por lo tanto, todo quedó en un susto, pero es una anécdota más para sumar a esta semana tan anómala de torneo en Indian Wells.
Alcaraz asegura que ha tenido unos meses complicados
El español reconoció, tras coronarse campeón del Masters 1.000 de Indian Wells, que vivió unos últimos dos meses complicados en los que le costó encontrarse a sí mismo y en los que no se divertía "al saltar a la pista", algo que ahora le hace disfrutar aún más esta victoria: "Pasé por meses complicados. Digamos que en los últimos dos meses me costó encontrarme a mí mismo. No me divertía al saltar a la pista. No era yo en la pista en los últimos dos meses, tres meses, fue complicado", dijo Alcaraz en la rueda de prensa posterior a la final ganada por 7-6(5) y 6-1 al ruso Daniil Medvedev.
"Significa mucho para mí levantar este trofeo, ganar este torneo, porque superé muchos problemas en mi cabeza, muchos problemas a nivel físico. Fue especial por eso. No es porque no ganaba desde Wimbledon, no importa eso, se trata de las sensaciones. Para mí no se trata de ganar o perder un torneo, se trata de divertirme jugando al tenis", prosiguió. "Por eso estoy feliz por levantar este trofeo, porque me encontré a mí mismo en este torneo", concluyó.
Alcaraz reconoció que llegó a este torneo sin saber si iba a poder jugar al cien por cien a causa de la lesión de tobillo sufrida en Río. También admitió que le costaba sonreír en pista: "Mi familia, mi equipo, la gente cerca de mí me preguntaba qué me había pasado, que no sonreía como lo hacía antes. Fue un momento complicado", contó.