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El detalle más surrealista del "pueblo fantasma" más popular que no ha pasado por desapercibido en las redes

Un usuario ha sido troleado en 'Google Maps' al buscar como es Matandrino, "pueblo fantasma" que ha puesto en venta una agencia inmobiliaria por 180.000 euros

Usa Google Maps para ver un "pueblo fantasma" en venta y no se puede creer lo que se encuentra.

Madrid

A 50 kilómetros de la ciudad de Segovia se encuentra Matandrino, un "pueblo fantasma" que lleva abandonado desde el año 1963. Ahora una agencia inmobiliaria ha decidido poner la aldea en venta por 180.000 euros y su anuncio ha llamado la atención de los compradores más curiosos.

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Un usuario de la red social X (antes Twitter) accedió a Google Maps para conocer el terreno que ofertaba la inmobiliaria cuando se topó con con una "la mayor troleada de todos los tiempos". Como ha contado a través de las redes, al ver las imágenes vio a algunas personas "haciendo cosas a cada cual más surrealista" en un pueblo que según indicaba el anuncio, está abandonado desde los años 60.

La broma es un proyecto pensado por la fotógrafa Elena Kendall- Aranda, quien editó las fotografías de la aldea abandonada para mostrar como sería si hubiera estado habitada en diferentes épocas.

Como ha señalado el seguidor en las redes, al buscar el pueblo Matandrino en la aplicación de "Maps" en Google, se pueden encontrar diferentes personajes como "una mujer que parece Amy de Big Bang Theory, susurrando algo al oído de un señor con una biblia en la mano y vestido de budista", a un chaval "completamente de negro cosechando botijos que han crecido del suelo", "un grupo de jóvenes haciendo un picnic improvisado" o a "una señora del siglo XIX conversando con un señor sentado en el alféizar de una ventana mientras se fuma un piti".

Matandrino , el "pueblo fantasma"

La pequeña localidad segoviana cuenta con una superficie total de 5.000 metros cuadrados y 17 construcciones donde vivían medio centenar de habitantes. Los vecinos de Matandrino se dedicaban a la agricultura y a la ganadería hasta que en los años 60 las pocas probabilidades de trabajo les hicieron emigrar a las grandes ciudades.

La última vecina en abandonar la aldea fue una limpiadora que se acabó trasladando junto a su familia a la localidad de Prádena en 1963. Desde ese momento, el municipio ha estado deshabitado y esperando a un comprador que esté dispuesto a darle un valor diferente, ya sea en un ámbito personal o como futuro destino turístico.