Qué se sabe (y qué no) sobre el cáncer de Kate Middleton
La princesa de Gales ha anunciado que tiene cáncer a través de un video publicado en las redes sociales y retransmitido por cadenas de televisión públicas como la 'CNN' o la 'BBC'
Kate Middleton ha hablado después de tres meses desaparecida y un sinfín de especulaciones sobre las causas de su ausencia de la esfera pública. La princesa de Gales ha anunciado a través de un vídeo que padece cáncer.En un primer momento, el motivo principal fue por una operación abdominal, pero depsués de la publicación de una foto editada las redes sociales comenzaron a sospechar que desde la Casa Real podrían estar ocultando el verdadero estado de salud de la princesa.
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El anuncio ha sacudido a un país que se preguntaba por su estado y despeja muchas de las dudas que existían sobre su salud, aunque también deja algunos interrogantes. Esto es lo que se sabe (y lo que no) hasta ahora sobre la enfermedad de la esposa del heredero a la Corona británica, Guillermo.
La enfermedad
Kate tiene cáncer, o al menos, lo ha tenido. El mensaje de la princesa en un vídeo deja claro que tras ser operada el pasado 16 de enero las pruebas evidenciaron que "había habido un cáncer" y que los médicos le han recomendado someterse a "quimioterapia preventiva".
El Palacio de Kensington (residencia oficial de los príncipes de Gales), sostiene con rotundidad que no revelará información médica privada sobre la princesa y pide que no se especule sobre qué tipo de cáncer ni en qué etapa se encontraba. "Estoy bien y poniéndome más fuerte cada día al centrarme en las cosas que me ayudarán a curarme", ha dicho Kate en su mensaje.
El tratamiento
La quimioterapia comenzó "a finales de febrero", según un portavoz de Kensington que ha agregado que la princesa se encuentra en "el camino hacia la recuperación". El tratamiento, que se desarrolla en un lugar que no ha sido revelado, durará hasta que los médicos lo consideren y el calendario no se hará público.
"Al elegir a los proveedores de la asistencia médica para la princesa, su equipo médico ha tenido en cuenta un conjunto de factores. Estos incluyen cuáles son los especialistas más apropiados para su enfermedad, y el impacto potencial sobre otros pacientes o sobre los recursos (...), y la privacidad y la seguridad de Su Alteza Real", ha agregado el portavoz.
Los tiempos
La repentina ausencia de Guillermo de un servicio religioso el pasado 27 de febrero en Windsor por su padrino, Constantino de Grecia, que en su momento se atribuyó solo a "razones personales", se debió a que Catalina acababa de recibir el diagnóstico. Este viernes también se ha averiguado que ella y Guillermo quisieron esperar para hacerlo público hasta que sintieron que era lo más apropiado para su familia.
En concreto, los principes decidieron que el mejor momento para comunicar a sus tres hijos Jorge, Carlota y Luis, la enfermedad era cuando comenzaran sus vacaciones de Semana Santa. Primero, han esperado a que Catalina asumiese el diagnóstico y se recuperara de la operación. Después se han centrado en cómo transmitir la noticia a sus hijos de la mejor manera.
La agenda pública
El Palacio de Kensington informará "cuando sea el momento adecuado" de la vuelta de la princesa de Gales a las actividades públicas. "La princesa volverá a sus tareas públicas cuando su equipo médico le dé su visto bueno. Está con buen ánimo y centrada en una plena recuperación", según ha señalado el portavoz.
El hecho de que pueda participar en algún evento aislado al comienzo de su tratamiento no querrá decir necesariamente que haya recuperado su actividad pública normal.
El príncipe Guillermo
Kate ha destacado en su mensaje la "gran fuente de confort y tranquilidad" que le ha supuesto tener a su lado a su marido Guillermo. La espiral de rumores que desató la ausencia de la princesa se centró a menudo en los supuestos problemas conyugales de la pareja y Kensington ha admitido que ha sido un período muy complicado para la familia.
Pese a ello, Guillermo se halla muy agradecido ante la respuesta de la gente y sigue centrado en su mujer y sus hijos, al tiempo que trata de compaginarlo con sus compromisos como heredero de la Corona, especialmente durante el tiempo en que su padre, el rey Carlos III, siga de baja también por otro cáncer. El príncipe tiene previsto retomar su agenda cuando los niños regresen al colegio tras las vacaciones de Pascua.
