Judit Mascó estuvo en la fiesta más exclusiva de los Oscar y el balance no puede ser más desalentador

La modelo Judit Mascó ha contado detalles de una de las fiestas más exclusivas que se celebran en Hollywood con motivo de los Oscar, a la que asistió a principios del pasado mes de marzo, y su balance no ha sido del todo positivo. En Transmite la SER, la también presentadora ha explicado cómo se sintió en la fiesta, organizada por Vanity Fair y a la que suelen acudir muchas celebridades.

"Esta es LA fiesta; conseguir una entrada para esta fiesta ya significa que eres lo más", ha empezado contando Mascó, que ha dejado entrever su sorpresa por haber sido invitada en esta ocasión: "Es que me siguen pasando batallitas". La supermodelo ha contado que la velada cumplía 30 años y que empezó como una fiesta improvisada de actores "para relajarse" después de las habitualmente largas y tediosas galas de los Oscar.

"Entro, lo primero que veo, de verdad, es a Michael Douglas y pienso '¿esto va a ser así' y nada, yo tan normal", ha comenzado explicando Mascó, que coincidió también con otros grandes nombres del cine como Steven Spielberg o Martin Scorsese. "Yo nada, muy mona, muy 'nice to meet you' y poca cosa más porque no sabía qué decir", ha dicho con naturalidad antes de hacer un balance muy español de lo que vivió: "No vi nada demasiado desfasado; son más aburridos que nosotros, también te lo digo".

Mascó ha explicado que lo que más le llamó la atención de la fiesta fue una mujer. "Era un mujer muy fuerte, que vi con un exceso de operaciones de estética, que me llamó la atención porque era muy fuerte. Yo me fijé en ella, pero al lado había un señor calvo sentado y me dijeron 'es el Jeff no sé qué' es que tengo muy mala memoria, el fundador de Amazon".

"He utilizado la guapura para ganarme la vida"

En la entrevista con Juan Carlos Ortega, Judit Mascó ha hablado también de algunos temas de actualidad, como el impacto que puede tener la inteligencia artificial en el mundo de las modelos y la moda y también de la palabra "guapa", tan omnipresente en su carrera.

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"Entiendo que tengo unas características físicas y que por ello he trabajado y he hecho una carrera, pero esas características las llevo en el ADN y no tiene ningún mérito, es como me han parido mis padres. Al final es algo mucho más que ser guapa, porque a mí me interesa qué es lo que hago con la guapura. Y yo, pues mira, la he convertido en mi herramienta de trabajo y la he utilizado para ganarme la vida", ha defendido Mascó.

Ella, que fue una supermodelo conocida en todo el mundo en los años noventa, se ha referido también a la edad. "Vengo de una profesión en la que a los veintipocos años ya te preguntan 'qué harás cuando acabes'. Es una profesión muy corta, en la que cuando llegas a los 30, ya han llegado las jóvenes y tú te vas retirando", ha explicado, antes de rematar con una reflexión de mucho interés.

"Yo no pienso en la edad en negativo, sino desde el agradecimiento porque sabiendo la edad que tengo, la trayectoria que he hecho y qué he hecho con todo ello, pues ya no se trata de una guapura de juventud", ha explicado.