A Netflix le funciona la estrategia de cerrar las cuentas compartidas

Netflix ha presentado resultados y su estrategia de cerrar cuentas compartidas sigue funcionando. La compañía ha sumado 9,3 millones de clientes nuevos en tres meses el quíntuple de lo que consiguió el año pasado. En total, tiene 269 millones de suscriptores y una audiencia de 500 millones de espectadores.

Y en dinero, Netflix presenta un beneficio neto de 2.330 millones de dólares, un 80% más que el año pasado. Es el mismo dinero que España gasta en política exterior y ayuda al desarrollo.

Es una cifra monstruosa que deja, ahora, una nueva estrategia: Netflix se lanza a comprar deportes:

• Retransmite su primer partido de tenis entre Rafa Nadal y Carlos Alcaraz.
• Ha comprado la lucha libre.

El boxeo de Mike Tyson suena todavía a experimento, pero con una caja de 2.300 millones de beneficios Netflix se puede permitir experimentar.

Netflix, la plataforma con más usuarios

Su estrategia de prohibir compartir cuentas y ofrecer servicios con publicidad, está funcionando y les mantiene como la plataforma de streaming con más usuarios. La empresa ofreció la modalidad con publicidad en noviembre de 2022 como compensación a los usuarios con menos capacidad o menos voluntad de pagar la cuota y que se quedaron sin servicio tras la prohibición de compartir contraseñas.

La empresa ha anunciado que, a partir del primer trimestre de 2025, no volverán a dar recuentos de suscriptores de manera trimestral como había estado haciendo hasta ahora. Y que sólo comunicará el alcance de hitos importantes. "Este cambio está realmente motivado por querer centrarse en lo que vemos que son las métricas clave que creemos que son más importantes para las empresas", dijo el codirector ejecutivo Greg Peters en un vídeo posterior a los resultados.

La decisión se ha interpretado en el sector como una señal de apaciguamiento en la guerra por los suscriptores que mantienen entre las plataformas de streaming.

Pero lo cierto es que no es la primera plataforma que toma la decisión. Ya en el pasado redes sociales como Facebook o Twitter tomaron la misma decisión cuando su crecimiento empezó a estancarse. Con Netflix cotizando en la bolsa, variaciones pequeñas en suscriptores pueden significar grandes caídas en el valor de la acción, y se plantea la posibilidad de que los directivos prefieran ahorrarse un escrutinio trimestral de mercado sobre el valor de sus participaciones.

Las acciones de Netflix han subido un 89% el año pasado, adelantándose a competidores como Walt Disney, que no consigue generar beneficios con su plataforma de streaming pese a crecer en usuarios.