El Cádiz ha consumado su descenso a segunda división en la penúltima jornada de Liga, no consiguió pasar del empate ante la UD Las Palmas en un encuentro en el que necesitaban la victoria para aferrarse a primera. No pudieron anotar en un partido en el que dominaron y generaron ocasiones. Se confirmó lo que parecía más probable antes de iniciar la jornada unificada, los gaditanos pierden la categoría a pesar de pelearlo hasta el último momento. Con las lágrimas de los aficionados en las gradas del Nuevo Mirandilla, el capitán de los amarillos, Conan Ledesma, dio la cara tras el encuentro y tampoco pudo contener el llanto por el descenso de su equipo. «La tristeza es la única sensación que nos queda, pedirle perdón a la gente, apretamos hasta el final pero el empate no nos alcanzó», declaró el portero. También habló de la reacción tardía del Cádiz que no le sirvió para mantenerse: «El equipo reaccionó cuando pudo, veníamos de una dinámica muy mala». Con la voz quebrada, Ledesma recordaba los años pasados en el club: «Me siento parte de esta gente, para mi es muy duro». La mayoría de aficionados se quedaron al final del encuentro para despedir a sus jugadores: «Ellos son el club, son los cimientos, los jugadores vamos y venimos pero ellos van a estar siempre», remarcó el capitán en agradecimiento a los seguidores gaditanos. No fue el único representante del Cádiz que quiso dar la cara tras la fatídica jornada, el presidente, Manuel Vizcaíno, se puso delante de los micrófonos para enviar el mensaje a la afición de que estará al frente del club para intentar regresar a primera división: «Me armo de más ganas para volver a conseguir el reto de llevar al Cádiz a primera división y desde ya me pongo a trabajar en ello, estoy convencido de que lo vamos a conseguir».