Cómo el estreno de una de las canciones más míticas de Raffaella Carrà en un programa de José María Iñigo acabó en comisaría
Aimar Bretos entrevista a Pedro Ángel Sánchez. Acaba de publicar 'Nada es eterno salvo la Carrà' (editorial Dos Bigotes), una biografía que cuenta el idilio de Raffaella Carrà con España
Cómo el estreno de una de las canciones más míticas de Raffaella Carrà en un programa de José María Iñigo acabó en comisaría
En 1970, Rai Uno emite un programa de televisión en el que aparece una plaza de toros de cartón piedra. Al lado de esa plaza de toros, aparece una mujer morena con un moño y un traje con volantes que canta una rumba. Si esa escena hubiese aparecido en la televisión española, habría salido en pantalla Lola Flores o Carmen Sevilla. En Italia, esa mujer era Raffaella Carrà y cantaba 'Un torero a Torino'. Unos rodajes en España habían bastado para que ella se enamorara de España y ya diera un toque español a sus canciones.
Una de los temas con más sabor español de Raffaella Carrà es 'Fiesta', que dio nombre a uno de sus discos más vendidos. El álbum, que fue disco de oro en nuestro país, se presentó con todos los honores el 17 de mayo de 1977 en 'Esta noche fiesta'. "Antes de marcharme voy a cantarles mi disco de verano", dijo la artista italiana antes de presentar la canción. La actuación, que estaba pensada como un "guiño a España", acabó de la peor manera posible.
"La canción tenía un sonido rumbero y el cuerpo de baile incluso llevaba mantones. Iban caracterizados de una manera muy determinada y eso no le gustó a una persona del público", explica Pedro Ángel Sánchez. El estreno de una canción festiva, que iba a convertirse en un éxito mundial, acabó en altercado. "Aquella rumbita alegre, sencilla y cien por cien cañí, ideada para divertirnos y hacer un guiño a nuestro país, parece ser que no se lo pareció en absoluto a uno de los asistentes a la gala", explica el autor de 'Nada es eterno, salvo la Carrà'. El espectador empezó a gritarle a Raffaella, quiso tirarle una copa, porque pensaba "que se estaba mofando de España". Cuando parte de los asistentes intentaron hacerle ver que estaba equivocado, "se lio a tortas" y todos acabaron en comisaría.
La persona del público que protagonizó el incidente resultó ser el hermano de Paquita Rico. El periodista Pedro Ángel Sánchez cuenta que el incidente acabó reflejado en la prensa de la época con titulares como 'Pelea en televisión'. Es lógico que fuera noticia porque, en sus primeros años de carrera en España, la revista Interviú divulgaba un ranking de los artistas mejor pagados. En el listado aparecían Miguel Bosé, Rocío Jurado, Rocío Dúrcal, Miguel Gallardo y Los Pecos. El segundo en el ranking era Camilo Sesto, que cobraba 750 000 pesetas por gala; pero ni siquiera él superaba a Carrà, que lideraba la lista con 1.250.000 pesetas por actuación. Ese caché la consolidaba como la estrella mejor pagada de finales de los setenta en España.
Estas anécdotas de la trayectoria de Raffaella Carrà en España están relatadas en el libro 'Nada es eterno salvo la Carrà' (Editorial Dos Bigotes) de Pedro Ángel Sánchez. Aquí puedes escuchar la entrevista íntegra de Aimar Bretos al autor del libro.
Las entrevistas de Aimar | Pedro Ángel Sánchez
Marisol Rojas
Trabaja en la Cadena Ser desde 2007. Empezó madrugando...