Quién fue Enric Marco, el supuesto superviviente del Holocausto que Mamen Mendizábal recuerda en 'Anatomía de...'
El formato recupera esta noche la historia del hombre que se hizo pasar por un superviviente del Holocausto
Enric Marco, en una imagen de archivo en los estudios de la Cadena SER.
Tras desgranar la semana pasada la historia de Tania Head, la falsa superviviente de los atentados del 11-S en Nueva York, esta noche vuelve a la pequeña pantalla 'Anatomía de...', el formato presentado por Mamen Mendizábal, que analiza y explica casos y sucesos rodeados de polémica y misterio. El turno es este domingo para Enric Marco (1921- 2022), quien decía ser uno de los pocos españoles que sobrevivieron en horror del Holocausto nazi.
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Su figura comenzó a darse a conocer durante los años de la Transición cuando, bajo el nombre de Enrique Marcos, comenzó su andadura como sindicalista. Militó en la década de los setenta en la Confederación Nacional del Trabajo (CNT) de la que llegó a ser Secretario General en su sección catalana. En 1978, pasó a ser Secretario General de la CNT, un puesto que ocuparía durante algo menos de dos años, momento en el que fue expulsado por diferencias con el resto de militantes. Después de estos años de actividad sindical, Marco pasó a ser a finales de los 90 vicepresidente de la FAPAC (Federación de Asociaciones de Padres de Alumnos de Cataluña) y poco tiempo después, empezó a hacerse popular como español que había sobrevivido a un campo de concentración nazi.
Aunque algunas fuentes cercanas a Marcon reconocen que desde su juventud había hablado de su supuesto papel como víctima del Holocausto, no fue hasta el año 2000 cuando comenzó a vivir de una mentira, que le llevó a conceder entrevistas y aparecer en platós de televisión. A partir de este momento, el catalán comenzó a estrechar sus vínculos con asociaciones de españoles víctimas del nazismo. Poco a poco se fue creando un nombre en estos grupos, a los que accedía contando que había sido enviado al campo de concentración de Flossenbürg, un pequeño recinto ubicado en la región de Baviera. Le bastó este testimonio para ser aceptado como víctima y convertirse en pocos meses en Presidente de la 'Asociación Amical de Mauthausen y otros campos'. Se trataba de una entidad que reunía a los españoles que habían sido víctimas del movimiento fascista liderado por Hitler.
En su narración, Marco argumentaba que había huido a Francia tras la Guerra Civil y que había sido deportado al citado campo de concentración después de colaborar con la resistencia francesa durante la Segunda Guerra Mundial. Allí, supuestamente habría convivido con hasta 14 españoles que habrían perecido durante el encierro. Impulsado por su dramática historia, universidades y medios de comunicación comenzaron a interesarse por su relato, del que ofrecía detalles como las torturas o las palabras que les dirigían los soldados nazis presentes en Flossenbürg.
El culmen de su farsa tuvo lugar en el año 2005, cuando el sindicalista acudió al Parlamento en un acto conmemorativo de las víctimas españolas del Holocausto en el que, incluso, ofreció un discurso ante los diputados. Fue justo a partir de este año cuando comienza a destaparse su farsa. El historiador Benito Bermejo, presente en el programa de Mendizábal, empieza a analizar las intervenciones de Marco y a investigar sobre su presencia en suelo alemán. Bermejo puede confirmar que el hombre catalán sí estuvo en el país germano a partir de 1941 pero no como prisionero, sino como trabajador de la industria bélica alemana. Un trabajo que pudo desarrollar gracias a un acuerdo firmado entre los mandatarios de ambos países, Franco y Hitler, en torno al año 40.
Tal y como pudo indagar este experto, Marco sí fue fichado por la Gestapo tras difundir propaganda comunista entre sus compañeros de trabajo, pero la Gestapo lo dejó en libertad al cabo de unas semanas y el impostor volvió en España. La caída de su máscara coincidió con un actor en Mauthausen en el que Marco iba a compartir espacio con verdaderas víctimas y representantes políticos. Al hacerse pública su gran mentira, el protagonista del programa de la Sexta volvió a España donde, días después, en mayo de 2005, dio una rueda de prensa en la que, aunque no asumió toda su mentira, sí admitió que había partes de su relato que no eran ciertas.
