Comienza el baile de diputados en el Parlamento Europeo: ¿Por qué la extrema derecha podría convertirse en la tercera familia política?
La balanza podría acabar por escorarse más a la derecha por otro movimiento que puede resultar fundamental para la composición de familias del próximo hemiciclo
Bruselas
Tras la formalización de los resultados, comienza el baile. La fotografía que deja el desenlace final de las urnas, con el Partido Popular Europeo a la cabeza (186 escaños), seguido de los Socialistas Europeos (135) y los liberales de Reniew Europa (79), podría alterarse en los próximos días por las negociaciones para formar grupo político. Porque por encima de la Izquierda Europea (36 diputados) o los Verdes (53) hay un grupo que el Parlamento Europeo ha llamado "otros" y que podría engordar alguna de las siete familias o grupos políticos que han compuesto la última legislatura. Y todo indica que estos diputados podrían llamar a las puertas de los grupos de ultraderecha. Se trata de formaciones nuevas, que se estrenan en el próximo hemiciclo, como Se Acabó la Fiesta, de Alvise Pérez.
La presidenta del Parlamento Europeo y los líderes de los grupos políticos se reúnen a puerta cerrada para explorar la composición de los grupos parlamentarios
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Pero la balanza podría acabar por escorarse más a la derecha por otro movimiento que puede resultar fundamental para la composición de familias del próximo hemiciclo. Resulta cada vez más improbable la creación de un gran grupo político nacido de la unión de Reformistas y Conservadores Europeos (ECR), la familia política liderada por Meloni, e Identidad y Democracia, la familia de Le Pen o de Salvini.
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Es un escenario que no conviene a Meloni, porque Von der Leyen sí diferencia a la formación de la italiana de la de Identidad y Democracia, que considera euroescéptica. Así que ahora mismo el escenario más realista es que el grupo político que lidera la primera ministra italiana y en el que están los conservadores y reformistas europeos crezca, pero a costa de los "otros" y de los no adscritos. Y ahí es clave el partido de Orban. La formación del primer ministro húngaro ofreció hace unas semanas entrar a formar parte de la familia de Meloni, lo que permitiría que la extrema derecha de los reformistas suban a tercera fuerza relegando a los liberales a cuarta posición, aunque su portavoz decía el domingo en Bruselas que no siempre ser más grande implica ser más influyente. Porque esta extrema derecha estaría más en seducir y encontrar pactos con los populares durante la legislatura que mirar más a su derecha.
Si los no adscritos acaban arrimándose a la extrema derecha, bajarían los liberales, que en unos días se reúne para votar la expulsión del partido del holandés Mark Rutte, por formar gobierno con la extrema derecha en Países Bajos. De confirmarse los dejaría más débiles todavía en el nuevo hemiciclo y más frágil por tanto ese centro desde el que Von der Leyen quiere tejer los apoyos para una nueva Comisión.
Los verdes se ofrecen a negociar para apoyar a Von der Leyen
En paralelo, la presidenta del Parlamento Europeo, Roberta Metsola, y los líderes de los grupos políticos se reunieron ayer puerta cerrada por primera vez tras las elecciones del domingo para analizar los resultados y explorar la composición de los grupos parlamentarios. El portavoz del PP Europeo dice que "hablarán con todos los grupos con los que se pueda construir una mayoría", los socialistas le piden "abrir esa mayoría a los verdes y no mirar a la ultraderecha".
Los socialistas piden al PP que se apoye también en los verdes y amplíe esa mayoría que sostenga a Von der Leyen, pero un potencial acercamiento a los ecologistas causa rechazo en algunas filas del Partido Popular. Hay voces que no lo consideran un socio estable y ponen como ejemplo el Pacto de Migración y Asilo, que contó con el rechazo de los verdes. Entonces el PP se apoyó en algunas delegaciones del grupo ultraconservador, entre ellos los diputados de Giorgia Meloni.
Hoy esa mayoría de centro es más débil, y eso prevé una legislatura en la que la potencial coalición parlamentaria tendría que buscar apoyos puntuales a izquierda o a derecha. Los verdes se ofrecen a negociar para apoyar a Von der Leyen, pero el PP no puede cerrar un acuerdo que pase por la promesa de que no negociará, aunque sea puntualmente, con la familia de Giorgia Meloni. Porque la legislatura es larga y la mayoría más frágil.
Enrique García
(Sevilla, 1994) Corresponsal en Bruselas, siguiendo y explicando la política comunitaria. Antes, redactor...