China abre una investigación a las importaciones de carne de cerdo que afecta principalmente a España

Días después de que la Unión Europea anunciara la imposición de aranceles a los vehículos eléctricos chinos, Pekín responde con una investigación contra el sector de la carne de cerdo, lo que impacta especialmente en España, principal exportador de este producto al gigante asiático dentro de la Unión Europea.

Según datos de la patronal del sector en España, Interporc, España exportó el pasado año más de 560.000 toneladas de porcino a China por valor de más de 1200 millones de euros. Casi el 21% de las importaciones de cerdo totales de China proceden de España, por encima del volumen que compra a Estados Unidos, Brasil, Países Bajos y Canadá.

El Ministerio de Comercio de China ha publicado un comunicado en el que se confirma la apertura de esta investigación a petición de la industria porcina del país. La petición se registró días antes del anuncio de Bruselas, si bien es ya después cuando el gobierno chino anuncia que la pone en marcha desde hoy mismo, que durará al menos un año, y que puede derivar en medidas contra esas importaciones que no detalla en el documento.

China investigará el impacto que la importación de productos como la carne de cerdo, tanto fresca como fría y congelada, y subproductos como despojos frescos, fríos, congelados, secos, ahumados o salados, grasa de ese mismo animal, intestinos, vejigas o estómagos de cerdo ha tenido sobre su producción nacional desde el 1 de enero de 2020 hasta el pasado 31 de diciembre de 2023.

El gobierno pide a las empresas que quieran participar en esa investigación que remitan datos económicos y detalles de la procedencia de todos esos productos y anuncia su disposición a realizar cuestionarios, muestreos e inspecciones a distintas dependencias.

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Respuesta del gobierno y de la patronal

El ministro de Agricultura, Luis Planas, ha reaccionado poco después de conocerse el comunicado del gobierno de China pidiendo que "haya margen para el entendimiento". Planas de momento llama a la prudencia y cree que es pronto para sacar conclusiones definitivas, que debe dejarse un margen de tiempo para la negociación con Pekín. En todo caso, ha recordado también que, a pesar de la importancia del mercado chino, las exportaciones de porcino a ese país muestran una tendencia a la baja.

Las guerras comerciales no son buenas para nadie

—  Luis Planas, ministro de Agricultura

Por su parte, Interporc, la patronal española del sector, responde asegurando que respeta totalmente la labor de las autoridades europeas, españolas y chinas. En este sentido, la relación del sector porcino español con autoridades y operadores chinos es excelente y lo seguirá siendo, según confirman, y añaden que esperan que la relación entre la UE y China sea siempre buena y que se mantenga la buena sintonía.

Añade que el sector porcino de capa blanca de España es el primer proveedor europeo de porcino del mercado chino gracias a entre otras cosas a la seguridad alimentaria que garantiza, además de por la confianza que se han ganado las empresas españolas respetando los acuerdos internacionales establecidos.

No preocupa en Bruselas

El portavoz de la Comisión Europea ha respondido a varias preguntas sobre este asunto en su rueda de prensa diaria. Según ha confirmado "no estamos preocupados en absoluto" por la investigación anunciada por las autoridades chinas, aunque sí admite que seguirán de cerca el procedimiento para que cumpla con las normas de la Organización Mundial del Comercio.

"Todos los subsidios relativos a nuestra política agraria común o a cualquier otra área de la Unión Europea están totalmente alineados con nuestras obligaciones con la Organización Mundial del Comercio y nos aseguramos siempre de que sea así", ha dicho, recordando además que "China y las empresas chinas disfrutan de todos los derechos procesales" en cuanto a los aranceles impuestos a sus empresas de vehículos eléctricos, por lo que espera que suceda lo mismo a la inversa.