"Guardo la portada de Lecturas con mi cabezón de bebé": la primera persona gestada por fecundación in vitro en España cumple 40 años

Madrid

El 12 de julio de 1984 tuvo lugar el nacimiento de la primera persona gestada por fecundación in vitro en la historia de España. Victoria Anna Perea es aquella niña que hace 40 años vino al mundo para cambiar la historia de la ciencia reproductiva de este país. Su gestación se produjo gracias a la labor de una quincena de especialistas de la Clínica Dexeus de Barcelona liderados por el doctor Pedro Barri, ginecólogo, y la doctora Anna Veiga, bióloga. En 'Hora 25' hablamos con Victoria y el Doctor Barri para saber cómo fue el proceso y qué ha sido de la vida de Victoria Anna Perea a un mes de su cuarenta cumpleaños.

¿Cómo fue ese momento en el que sus padres le cuentan a Victoria quién era y cómo la gestaron? Así lo explica: "Si te digo la verdad, no recuerdo un momento concreto en el que me sentaran en el sofá y me dijeran 'tenemos algo que decirte'. No, fue como muy natural. Yo de pequeña pululaba por casa en algunos cumples, había prensa, y mi madre me contó que había nacido por un proceso distinto al resto. Y ya está. Todo normal". La prensa no hemos dejado que tuviera un cumpleaños tranquilo: "Algunos han estado un poco liados, sí", ríe Victoria.

Victoria nos confiesa que guarda las portadas de aquellos días: "Y tanto. Están en casa. Tengo una Lecturas en la que salgo en toda la portada con mi cabezón de bebé. De hecho, hemos hecho mudanza y siempre salen. Están ahí en las cajas guardadas con mucho cariño. Fotos, recortes, revistas...". Sin embargo, el hecho de haber sido la primera persona gestada por fecundación in vitro en España no ha condicionado demasiado su vida, más allá del interés científico y de la prensa: "Te diría que prácticamente no".

Y continúa: "Es verdad que cuando eres mayor, a medida que maduras, te vas dando cuenta del impacto que tuvo esta noticia en la sociedad. Pero ha sido para bien. Porque si mi noticia, en algún momento, cuando se habla de estos temas ayuda a que otras personas puedan sentirse representadas o se le da visibilidad a cierto tema que nosotros desde casa lo hemos tratado con total naturalidad, pues muy bien".

La valentía de los padres

Así contaba Victoria Anna Perea la actitud de sus padres: "Mi madre estaba súper convencida. Mi padre tenía un poco más de duda, pero al final lo hablaron entre los dos y dijeron: 'vamos a por esto'. Para ellos era como su última carta. Se habían informado muchísimo en prensa internacional, la primera del mundo había sido en Reino Unido, y seguían mucho esa actualidad. Pese a la incertidumbre que les podía causar todo esto, la verdad es que el equipo médico les generó mucha sensación de confianza y dijeron que a por ello".

Únete al canal de WhatsApp de la SER

¿Y cómo vivieron el proceso los padres? "Mi madre es la persona más tranquila del mundo. Ella iba tranquila por la calle, cuando el embarazo era incipiente y aún no lo sabía la familia, y pensaba: 'jo, estoy embarazada. Está todo esto detrás cuando salga. Ahora voy como una desconocida por la calle, pero se va a liar. Lo vivieron con muchísima tranquilidad. Anna Veiga, la bióloga, siempre dice que eran mis padres los que los tranquilizaban a ellos". El segundo nombre de Victoria, Anna, es por la Doctora Veiga.

Los padres científicos

Anna Veiga es parte del equipo de especialistas de la Clínica Dexeus de Barcelona que pusieron en marcha la vida de Victoria: "Madre científica ya es un término que suena como raro, pero sí. Unos pioneros". ¿Familia? "Sin duda. Son familia. Es como mi tía. Me sigue en Instagram, nos ponemos comentarios, la veo a menudo. Mantenemos contacto. Para mis padres fue una vivencia muy fuerte que les cambió la vida y a ese equipo médico también le cambió la vida. Nos tenemos muchísimo cariño de todo ese tránsito que se vivió durante esos meses y crearon un vínculo que a día de hoy sigue".

En este momento de la conversación se incorpora a la entrevista el Doctor Pedro Barri, presidente de la Fundación Dexeus Mujer, y el ginecólogo responsable del equipo que hizo posible el nacimiento de Victoria: "Es verdad que somos familia. Desde el primer momento con Dolors y Ricard, sus padres, y con Victoria no hay que decirlo, es un vínculo que va más allá de lo profesional. Es un vínculo personal. Hemos compartido muy buenos momentos juntos. Hemos compartido malos momentos también: enfermedades que ha habido en la familia, la pérdida de Ricard, el padre de Victoria... Y ahí estuvimos todos. Somos familia", explica el Doctor Barri.

Doctor Pedro Barri

¿Cómo recuerda el Doctor aquel 12 de julio de 1984? "Fue realmente muy emocionante porque tomamos la decisión de que era el momento de acabar el embarazo y había que hacer una cesárea. Dolors, la madre de Victoria, había perdido ya un embarazo y nos aseguramos de que Victoria estuviera en condiciones de poder nacer, poder respirar bien, unas pruebas de madurez fetal que hicimos y decidimos que aquel jueves a las siete de la tarde íbamos a hacer la cesárea. La niña nació fantásticamente bien. Dolors estaba bajo anestesia epidural y siguió la cesárea en todo momento y estuvo al corriente de cómo iba todo. Para nosotros fue tremendamente emotivo, acabamos llorando todos".

Y continúa: "Primero, era una satisfacción por la familia. El embarazo fue un embarazo normal, pero había habido un episodio al inicio del embarazo en el que nos habían llamado al hospital diciendo que una paciente embarazada de fecundación in vitro había tenido una hemorragia y se había muerto. Nos sorprendió tremendamente porque sabíamos que Dolors estaba bien, pero esto era un domingo por la tarde y Anna Veiga y yo nos fuimos a casa de Dolors y Ricard que, cuando eran las diez de la noche y llamamos desde el portero automático, el susto se lo dieron ellos de decir: '¿qué hacen aquí a las diez de la noche de un domingo?'. Había sido una broma de mal gusto que nos habían gastado".

A nivel profesional, no hay duda de que fue una satisfacción para el Doctor Barri: "Era el primer niño que nacía en España y en América Latina. Habían sido bastantes equipos que estaban trabajando en el tema y nosotros conseguimos ser pioneros. No cabe duda de que es un pequeño logro científico que enorgullece a todo el equipo médico que había trabajado muy fuerte. Recuerdo que el primer año Anna Veiga, Gloria Calderón y yo, que éramos el núcleo de este programa, trabajamos 50 fines de semana de los 54 que tiene el año".

¿En aquel momento hubo debate ético? "Hubo mucho", responde el Doctor Barri. "Es normal, primero porque era un tema que afectaba a la salud y los temas de salud interesan a todo el mundo. Y, en segundo lugar, porque cambiaba algo tan ancestral y tan clásico como es la manera de reproducirse que tenemos los humanos. Hubo debate. Nosotros tuvimos mucho interés en participar en todas las mesas redondas, coloquios, porque muchas veces posturas muy radicales venían de la falta de información. La gente tenía una idea que no era real. La gente tenía idea de que era poco menos que diabólico lo que nosotros hacíamos en el laboratorio. En el momento en el que se explica que esto es un tratamiento médico, que hay el máximo respeto por los embriones que se cultivan en el laboratorio, etc., pues la gente entiende que es un tratamiento médico para solucionar un problema médico como es la esterilidad".

Victoria Anna Perea

¿Quién es Victoria Anna Perea más allá de la primera persona nacida por fecundación in vitro en España? ¿En qué se ha convertido? "Pues soy una ciudadana con una vida totalmente normal. Después de los 25, cuando una ya entiende el impacto que tiene esto en la sociedad y lo que supone la exposición en los medios, pues una ya toma el control de cómo gestiona este tema y decidí gestionarlo desde un perfil bajo. Selecciono mucho la exposición que tengo. Primero porque no va conmigo exponerme y, segundo, que lo que se haga sea de valor, que se aporte algo. Hoy en día trabajo, tengo pareja, me encanta viajar, leo un montón. Soy generación millennial total", nos cuenta Victoria.