España jugará la final de la Eurocopa el domingo tras vencer anoche a Francia por dos goles a uno. Lamine Yamal fue uno de los principales protagonistas del encuentro. El delantero rompió el récord de precocidad en marcar en un gran torneo y empató el partido después de que el equipo galo se pusiera por delante en el minuto ocho. Dani Olmo fue el encargado de poner por delante a la Roja. En cuanto finalizó la final, la UEFA utilizó una celebración de Nico Williams y Lamine Yamal para anunciar el pase de España en la final. Ambos están desplegando un juego que despierta la admiración en todo el mundo. «Superestrella» le llama la BBC a Lamine Yamal. «El siguiente semidiós» le apoda The Times. «Yamal proclama la próxima era dorada de España», sentencia el The Indepedent. En la francesa, tampoco ahorran halagos: «A sus 16 años, Lamine Yamal hace que Kylian Mbappé, de 25, parezca un viejo veterano», se lee en Le Figaro. Tanto la juventud como el origen de los jugadores han sido algunos de los asuntos que se han destacado estos días tanto en los medios de comunicación como en las redes sociales. En pleno debate político sobre el reparto de migrantes no acompañados entre las comunidades y con la proposición no de ley presentada por Vox en el Congreso con medidas como la expulsión inmediata de las personas que se encuentren en España en situación irregular, algunas características de las estrellas de la Selección han sido puestas sobre la mesa. Tras finalizar el partido, Héctor de Miguel ha puesto un tuit en el que se apropia del término MENA (siglas de Menores Extranjeros No Acompañados), utilizado de forma despectiva por la ultraderecha, para ironizar y escribir: «La que están liando un mena, un negro y varios vascos». Lamine Yamal, de 16 años, es hijo de Mounir Nasraoui, originario de Marruecos, y de Sheila Ebana, de Guinea Ecuatorial. El delantero nació el 13 de julio de 2007 en Esplugas de Llobregat, aunque se crió en Mataró. Nico Williams tiene 21 años y nació en Pamplona. Juega junto a su hermano, Iñaki, de Bilbao, en el Athletic Club. Los padres Félix Williams y María Comfort Arthuer, son de Ghana, donde se conocieron en la década de los 90. Juntos decidieron venir a España en busca de un futuro mejor. Un buen número de los jugadores de la Selección son vascos como Unai Simón y Mikel Oyarzabal.