El líder del ejército de Sudán sobrevive a un ataques con drones que ha dejado cinco muertos
El ataque llega una semana después del anuncio de la retoma de conversaciones para un alto el fuego
Miembros del ejército de Sudán, leal al líder militar Abdelfatah al Burhan / -
Madrid
El 15 abril de 2023 inició un conflicto militar en Sudán. Un conflicto olvidado que después de año y medio, ha dejado entre 30.000 y 150.000 muertos, y provocado el desplazamiento de más de 10 millones de personas, convirtiendo a Sudán en el país con más desplazados del mundo, según informó la ONU. La guerra civil estalló por tensiones entre dos grupos militares: las Fuerzas Armadas de Sudán (FAS) contra el grupo paramilitar Fuerzas de Apoyo Rápido (FAR).
Los primeros obligaron a dimitir al ex presidente Omar al Bashir en el golpe de Estado de 2019, y aunque en teoría buscaban un cambio democrático, en 2021 iniciaron otro golpe de Estado, nombrando como nuevo presidente del Consejo Soberano a su líder, Abdelfatah al Burhan. Los segundos, simpatizantes del ex presidente Omar, intentaron repartirse el pastel con las FAS, para finalmente iniciar la guerra civil en 2023, dirigidos por Mohamed Hamdan Daglo alias "Hemedti".
Buscando un avance, las conversaciones organizadas por Estados Unidos y Arabia Saudí para un alto el fuego están previstas en Suiza en agosto. Sin embargo, este miércoles varios drones han atacado una ceremonia de graduación militar que causó cinco muertos. El líder de las FAS Abdelfatah al Burhan, sobrevivió al ataque en Gebeit, al este de Sudán y tampoco resultó herido. El grupo paramilitar FAR ha negado cualquier implicación.
Sin embargo, horas después, al Burhan ha dicho que el ejército "no tiene miedo de los drones ni de la muerte", y que seguirán luchando hasta el final, asegurando ahora, que "no negociarán con los rebeldes." El consejo sudanés exige que para poder hablar, deben "incluir a todos los sectores del pueblo y movimientos de lucha que participan en la batalla de la dignidad," excepto a las FAR, y piden que no se les escuche, y que abandonen los territorios ocupados. Solo así, frenaran la guerra.
Tendremos que esperar a agosto, pero todo apunta a que no habrá una solución, y seguirá activo un conflicto que como informó la ONU, está llevando a millones de personas al borde de la hambruna.