Aparecen más de 100 toneladas de peces muertos en Grecia: "El olor es insoportable"
La ciudad más contaminada de Grecia vive otro desastre medioambiental cuando todavía no se ha recuperado de las consecuencias de las inundaciones de 2023
Madrid
Volos es uno de los destinos turísticos preferidos por quienes visitan Grecia. Se considera una de las maravillas naturales de la península por sus playas cristalinas y tranquilas que contrastan con las montañas por las que transcurren pistas de esquí que se llenan de visitantes en invierno. Pero, la realidad ambiental de la tercera ciudad más poblada de Grecia choca de frente con las costas llenas de turistas y las calles repletas de casas vacacionales. Esta semana, Volos ha sufrido otro desastre medioambiental, cuando todavía son visibles las consecuencias de las inundaciones de septiembre de 2023.
Volos es la ciudad más contaminada de Grecia y, como el resto del sur de Europa, se ha visto fuertemente afectada por las consecuencias adversas de las altas temperaturas extremas de este verano. Incendios forestales salvajes, muertes relacionadas con las altas temperaturas e inundaciones han sido solo algunos de los fenómenos por los que la ciudad se ha visto dañada. La última catástrofe medioambiental ha sido la aparición de millones de peces muertos que han colapsado el puerto de la ciudad turística.
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El gobernador regional ha declarado el estado de emergencia
Las imágenes aparecieron en la televisión y en seguida se llenaron las redes sociales de vídeos y fotos de lo que estaba ocurriendo. Los vídeos mostraban como el puerto de la ciudad estaba colapsado por un manto plateado de peces muertos. Esta muerte masiva de peces se atribuye al cambio climáticos y los expertos advierten que esta aparición masiva de especies muertas está vinculada a una combinación de calentamiento global y de una inadecuada gestión de los recursos hídricos públicos por parte de los gobernadores.
Se cree que los peces fueron arrastrados por las corrientes desde un río de la cercana área del lago Karla, un humedal protegido por su importancia natural por la Unión Europea, que ha sufrido de forma brusca una subida del nivel del agua tras las grandes tormentas que causaron inundaciones el pasado septiembre de 2023.
A esta subida del nivel del agua, se han sumado, según científicos que estudian la zona, las elevadísimas temperaturas del verano que han provocado la evaporación del agua y han dejado al descubierto un manto de millones de peces muertos. Al evaporarse el agua, los peces sufrieron la falta de oxígeno de la zona, lo que imposibilitó su supervivencia.
Prohibido el baño en algunas de las zonas más turísticas
Con el final de verano a la vuelta de la esquina y con los turistas ultimando los días en los paradisíacos paisajes de Volos, el Departamento de Salud Pública y Asistencia Social de la Región de Tesalia ha tomado la decisión de prohibir el baño en ciertas playas. En la zona, además, se ha extendido un "olor insoportable". Desde el gobierno de la región han declarado el estado de emergencia y han descrito la situación como "un desastre ecológico y económico sin precedentes".
Los establecimientos locales, la mayoría de los cuales son dependientes del sector turístico, han reportado unas pérdidas cercanas al 80% desde que apareciese el manto plateado de peces. El dueño de un restaurante de la ciudad ha asegurado a los medios de comunicación que su local "está desierto" y que nunca había visto algo similar. "Un mar de pescado podrido a cinco metros de nuestras mesas. ¿Quién lo hubiera imaginado?", ha dicho.
Pestañas abiertas | Ecoansiedad, ecotopías y cambio climático
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Tres grandes excavadoras se encuentran trabajando en la zona para tratar de recoger los cadáveres. Además, se han instalado una segunda red en el río para contener a los peces y concentrarlos en zonas específicas y evitar el colapso del puerto.
Las autoridades han ordenado el inicio de una investigación para determinar las causas exactas de este desastre medioambiental y para aclarar hasta qué punto son responsables las autoridades que gestionan los recursos hídricos locales por no impedir que las aguas del lago Karla se filtran al mar, ya que para reducir el nivel del agua, el gobierno de la región abrió la compuerta de la presa situada en el arroyo de Xiria, por donde los peces fueron arrastradas de las zonas inundadas hasta el mar donde sufrieron la falta de oxígeno.