Países Bajos pide permiso a la Comisión para dejar de cumplir las normas comunitarias de migración y asilo

Distintos países de la Unión Europea siguen tensando la cuerda para endurecer las medidas de control frente a los inmigrantes. Es el caso de varias naciones gobernadas por la extrema derecha, como Hungría o Países Bajos, o de otras cuyo gobierno teme precisamente el auge de los ultras y está radicalizando su discurso, como es el caso de Alemania.

El último movimiento lo ha protagonizado este miércoles el gobierno de coalición de Países Bajos, en el que varios partidos sostienen un ejecutivo en el que quien lleva la voz cantante es el Partido por la Libertad dirigido por el ultraderechista Geert Wilders. La ministra encargada de las políticas migratorias, Marjolein Faber, ha confirmado en X que ha pedido a la Comisión Europea que Países Bajos quede eximido de cumplir con las reglas sobre migración y asilo.

"Necesitamos estar al cargo de nuestra política de asilo de nuevo", escribe Faber, que va un paso más allá con respecto a la carta firmada este año por 15 países de la UE, entre ellos el suyo, en el que pedían endurecer las normas establecidas en el Pacto sobre Migración y Asilo recientemente aprobado en el Parlamento Europeo. Entre otros puntos, esos países son partidarios de externalizar en terceros países la recepción y solicitudes de asilo de inmigrantes, tal y como Italia ha acordado con Albania, por ejemplo.

Bruselas contempla sanciones

Una de las portavoces de la Comisión Europea, Anitta Hipper, ha recordado este mediodía que las normas de migración y asilo "siguen siendo vinculantes" para Países Bajos. La Comisaria que impulsó el Pacto, Ylva Johansson, ha recordado no sólo la obligatoriedad de cumplir con lo establecido en el texto que también asumió en su momento Países Bajos, sino que ha avisado de que si un Estado miembro se salta lo acordado podría verse sujeto a la apertura de un procedimiento de infracción.

Los 27 aún tienen dos años para terminar de implementar el acuerdo que endurece de hecho la política de asilo y el gobierno neerlandés no se plantea dejar de cumplir con lo pactado si no obtiene permiso para poder saltarse las normas comunitarias. Su propuesta pretende ir más allá de esas normas y expulsar incluso de manera forzada a quien no tenga permiso de residencia, ampliar el número de delitos por los que se niegue el asilo, eliminar la reunificación familiar para hijos adultos y endurecer también las condiciones para ese proceso de reunificación.

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Según datos de la Unión Europea, Países Bajos no es de los territorios que más solicitudes de asilo recibe. En lo que llevamos de 2024, apenas el 3% de todas las solicitudes a nivel comunitario se dan en ese país, lejos del 22% de Alemania o el 19% de España.