Gastro

Solo 4 de cada 10 centros escolares tienen cocina propia: así influye en el futuro comer bien de pequeño

Aunque se ha mejorado mucho, todavía faltan menús más saludables: hay una gran disparidad en la gestión del servicio

Menos de la mitad de centros escolares españoles tienen cocina propia / Westend61

Madrid

Alrededor de 4 de cada 10 de los centros escolares en España —menos de la mitad— elaboran los menús diarios in situ y, aunque se ha mejorado mucho, la falta de hábitos saludables sigue siendo una de las principales reclamaciones de asociaciones de padres y expertos.

"Una dieta saludable repercute directamente en la concentración y en el rendimiento", señala la profesora de Estudios de Ciencias de la Salud de la Universitat Oberta de Catalunya (UOC) e investigadora del grupo FoodLab, que explica que en edades de entre 3 y 16 años la necesidad de nutrientes como ácidos grasos, omega 3, ácido fólico, minerales, hierro o zinc son "importantes para el desarrollo del cerebro y el funcionamiento cognitivo".

El investigador del Centro de análisis de FUNCAS Ismael Sanz coincide en la importancia de la alimentación en la infancia y apuesta por una universalización de las becas comedor, ya que "también ayudaría a aumentar el aprendizaje". Cree que aumentar el ratio actual del 11,5% de alumnos becados también reduciría la obesidad infantil. Explica que los menús escolares "pueden ser más equilibrados que en algunos hogares con rentas bajas" al apuntar que la cesta de la compra de los colectivos más vulnerables no suele incluir productos frescos o de temporada, que son más caros.

En Suecia un estudio elaborado por varios economistas vinculados a la salud y publicado por Review of Economic Studies demuestra que los ingresos laborales de los jóvenes que estudiaron con becas comedor durante toda su escolarización aumentaron el 3% y hasta un 5,8% en los que procedían de familias vulnerables. "Las etapas de la infancia, primaria y secundaria requieren elevados niveles de energía y nutrientes para que el organismo se termine de desarrollar", insiste la investigadora de la UOC que avanza que otro estudio están terminando de elaborar demuestra que comiendo un puñado de nueces diarios durante tres meses se aumenta la concentración.

Faltan menús más saludables

La queja generalizada de padres y alumnos es la falta de menús más saludables en los centros escolares. La Confederación Española de Asociaciones de Padres y Madres de Alumnado (CEAPA) reclama una ley que permita la introducción de criterios de compra pública verde en las licitaciones y otros contratos de gestión relacionados con los comedores escolares.

"Llevamos años trabajando para impulsar modelos de gestión que no se centren exclusivamente en el criterio económico, sino que prioricen productos de proximidad, ecológicos y de temporada, además de fomentar la reducción de envases y del transporte", señala a EFE la presidenta de CEAPA, María Capellán que incide en que el coste de los menús repercute en la salud de los menores y aboga por la inversión en menús equilibrados.

La OCU apunta que el 73% de los alumnos de colegios públicos, el 21% de los concertados y el 6% de privados comen durante casi diez meses en sus centros y más de la mitad de los menús esta muy desequilibrado. "Debemos ser conscientes de que para muchos niños y niñas de familias con menos recursos, el almuerzo en el comedor escolar es la principal comida que reciben al día, por lo que hay que asegurar que sea de calidad y les aporte todo lo necesario para crecer de manera sana", recalca la presidenta de la CEAPA que apuesta por fomentar los centros educativos con cocina in situ y comedores en los institutos.

Y es que España tiene un sistema de comedor escolar de subvención parcial en el que cada comunidad autónoma tiene su propia regulación sobre los servicios y hay una gran disparidad en la gestión del servicio.

¿Qué se come en los colegios?

Los menús de los comedores escolares han mejorado en los últimos 20 años, siguiendo las "guías" que elabora la Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición (AESAN) y que empiezan a aplicar la mayoría de Comunidades Autónomas, señala a EFE la investigadora de la UOC.

Además según la Ley de seguridad alimentaria y nutrición las autoridades competentes deben velar por que las comidas servidas sean variadas, equilibradas y estén adaptadas a las necesidades nutricionales de cada grupo de edad.

"Ahora se prioriza más los alimentos integrales. Empieza a haber más presencia de verdura y fruta y se observa una limitación de alimentos de proteína animal, de frituras, ultraprocesados, o de alimentos con sal añadida", recuerda Nadia San Onofre que recalca que la calidad de los menús no es distinta en colegios públicos o concertados sino que ésta varía según la ubicación del centro.

Los últimos informes de la OCU señalan que el arroz, la pasta y las patatas se dan de media unas 3 veces a la semana y el consumo de legumbres no llega al mínimo recomendado de 1,5 veces semanales mientras que la presencia de fruta de temporada es escasa: plátanos, manzanas y peras es lo habitual.

El gasto en comedores

Por otra parte, el gasto de las familias en comedores suele rondar los 96 euros mensuales en un centro público, los 130 en uno concertado y los 150 en los privados.

Según el análisis que ha hecho CEAPA en colaboración con las federaciones territoriales, el precio del comedor escolar este curso oscila entre los 4,35 euros de la Comunidad Valenciana y los 7,95 de La Rioja y recuerda la "injusticia" que suponen tarifas desiguales según el lugar de residencia.