El juicio de los hermanos Menéndez: ¿Puede la televisión conseguir que se revise una sentencia?

En el año 1989 los hermanos Menéndez asesinaron a sus padres, el juicio no comenzó hasta cuatro años después en 1993 y tuvo la peculiaridad de que fue uno de los primeros juicios transmitidos íntegramente por televisión, teniendo una enorme repercusión mediática.

Erik y Lyle reconocieron frente al jurado haber asesinado a sus progenitores alegando que lo habían hecho 'en defensa propia' ya que no podían soportar más los supuestos abusos psicológicos, físicos y sexuales a los que les sometía su padre con el conocimiento de su madre.

Los hermanos relataron ante los atónitos ojos de los televidentes escalofriantes detalles sobre los supuestos golpes y violaciones de José Menéndez, y también alegaron que este los tenía amenazados de muerte para que no contaran lo que estaba sucediendo.

POSICIÓN DE LA FISCALÍA

La fiscalía basó su acusación en que cometieron el asesinato de forma fría y premeditada para heredar el patrimonio de sus padres, estimado en 14 millones de dólares. Además rechazó la tesis de los supuestos abusos diciendo entre otras cosas, que de ser reales se hubiera sabido, que los menores hubieran pedido auxilio y no habrían soportado en silencio. Diciendo textualmente:

Únete al canal de WhatsApp de la SER

“Erik quiere que crean que su padre abusa de él de forma rutinaria, obligándole a realizar actos sexuales contra su voluntad; espera que crean que nunca se le ocurrió irse”.

Era un juicio con jurado, y un único juicio pero con dos jurados distintos, uno para cada acusado. En ambos casos algunos miembros del jurado creyeron a los hermanos, mientras otros se adherían al planteamiento de los fiscales. Hubo una división entre dos posturas jurídicas: homicidio imprudente/asesinato. Al no lograr un acuerdo sobre el veredicto el primer juicio se declaró nulo.

Se celebró un segundo juicio pero cambiaron totalmente las circunstancias. Sin cámaras, el juez restringe los testimonios y pruebas que usaba la defensa sobre la dinámica supuestamente abusiva impuesta por José Menéndez en la crianza de sus hijos.

El juez exigió a la defensa que para seguir esa línea presentara alguna prueba de que esos abusos habían sido reales. La defensa no fue capaz, además, de presentar testigos u otra prueba, por lo que los testimonios de ambos eran prácticamente lo único a lo que podían aferrar su defensa.

Ambos hermanos fueron condenados a cadena perpetua sin posibilidad de libertad condicional.

¿SE VA A REVISAR LA SENTENCIA DEL JUICIO 30 AÑOS DESPUÉS?

Hoy 30 años después, los profesionales de la justicia han tenido juicios de agresión sexual a menores y saben perfectamente que es posible que el menor no diga nada y que por supervivencia acepté el abuso.

Existen víctimas que manifiestan por supervivencia querer a su agresor o que recuerdan de repente muchos años después los actos de abuso. La convivencia con violencia sexual cronificada puede dar lugar a comportamientos de las víctimas por supervivencia aparentemente extraños.

El fiscal del distrito del condado de Los Ángeles, George Gascón, informó hace dos semanas que su oficina está evaluando nuevas evidencias de posible abuso sexual en el caso del asesinato de los hermanos Menéndez.

Entre las nuevas pruebas dijo el fiscal se encuentra una carta que supuestamente fue enviada por uno de los hermanos a otro miembro de la familia hablando de que él era víctima de abusos, además de otras pruebas proporcionadas por sus abogados de parte de una persona que alega 'que fue abusado por el padre'.

'Ninguna de esta información ha sido confirmada', insistió Gascón, quien anunció que se ha fijado una nueva audiencia judicial para Erik y Lyle Menéndez el próximo 29 de noviembre para estudiar estas pruebas.

El 17 de octubre los familiares de Lyle y Erik Menéndez han realizado una rueda de prensa en la que han hecho apasionadas peticiones para que sean puestos en libertad después de más de 30 años.