Luces y sombras del bono de alquiler joven: de los requisitos para pedirlo a la ausencia de pisos para optar a la ayuda
En los puntos más calientes, como Barcelona o Madrid, apenas hay inmuebles que cumplan las condiciones necesarias para percibir el bono de alquiler joven del Gobierno
El problema de la vivienda en España
Madrid
El Gobierno aprobó en el último Consejo de Ministros la nueva convocatoria del bono de alquiler joven dotada con 200 millones de euros, tras las manifestaciones sobre la vivienda que se produjeron el pasado domingo en ciudades como Madrid. Además de las personas que viven bajo el umbral de la pobreza, muchas otras tienen salarios lo suficientemente ajustados como para tener imposible, o muy difícil, pagarse un techo, una casa.
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Por eso, el Gobierno les dará dinero para pagar su alquiler en una medida muy discutida y que tiene unos requisitos concretos para pedir ese bono. Hay muchos límites que tener en cuenta y con estos límites no parece que la situación pueda cambiar mucho. Hay un límite de edad y un tope de lo que se paga de alquiler, pero ¿cuáles son los requisitos para los solicitantes?:
- Tener entre 18 y 35 años.
- Un salario inferior a los 21.600 euros anuales.
- Acreditar rentas del trabajo.
- No tener ninguna vivienda en propiedad.
La ayuda es de 250 euros al mes, durante un máximo de 2 años. Además, el inmueble también tiene que cumplir unas condiciones:
- El alquiler de ese piso tiene que ser de 600 euros como máximo.
- De 300 euros en el caso de habitaciones.
- Ampliables hasta 900 euros, si así lo quieren las comunidades autónomas.
Estos son los cimientos que pone el Ministerio de Vivienda, idénticos a las anteriores convocatorias, pero son las comunidades autónomas las que pueden maniobrar con estas condiciones para acercar el bono joven a más gente. Algunas lo están haciendo y tienen cierto margen para mover esos precios máximos de los inmuebles hasta 900 euros.
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Los criterios de renta pueden hacer distinciones entre municipios y también pueden aportar sus propios fondos para cofinanciar estas ayudas. Eso está haciendo que la permeabilidad del bono joven sea casi radicalmente distinta entre territorios. El 65% de los solicitantes la ha recibido en La Rioja, por ejemplo, frente al 23-24% de Madrid o Barcelona.
Las tres tristes trampas del alquiler
El escenario es muy distinto
Sin embargo, si rastreamos los portales inmobiliarios, el escenario es muy distinto. En Cantabria, donde el tope máximo para recibir la ayuda se amplió a los 800 euros al mes por piso, casi el 40% de los anuncios en Idealista cumple con esos requisitos. También ocurre en Extremadura: en ciudades como Badajoz el 30% de los anuncios está por debajo de los 600 euros. Es decir, hay pisos que cumplen con los requerimientos y es justo aquí donde el bono está llegando. En Cantabria llega a seis de cada diez solicitantes.
Sin embargo, ¿qué ocurre en los puntos más calientes? Sencillamente no hay pisos. Según Fotocasa, hay solo 35 inmuebles ofertados en la ciudad de Barcelona por debajo de los 900 euros de los 2.900 pisos en alquiler que tiene ofertados la plataforma. Es poco más del 1% del total. En Cataluña, ese bono apenas ha llegado a dos de cada diez solicitantes, pero es que no hay inmuebles que cumplan las condiciones.
Y lo mismo pasa en Madrid. Solo el 4% de los pisos que publica Idealista está por debajo de los 900 euros. ¿Qué pasa cuando damos con uno de esos pisos? Teresa tuvo suerte y consiguió dar con uno de ellos: "Me han llegado a preguntar antes de visitar el piso cuánto medía. Al llegar me doy cuenta de que es por una buhardilla, en la que no me puedo ni poner de pie, por la que me piden 850 euros".
Así que este es el paisaje inmobiliario. De hecho, en Madrid es mucho más fácil encontrar un piso de más de 3.000 euros, que uno de menos de 900 euros. Uno de cada cuatro anuncios publicados es de pisos de más de 4.000 euros. Solo el 4%, 305 pisos en todo Madrid, son de menos de 900 euros.