La Stasi, el "engendro" que crearon tres hombres entrenados en España
La "policía política" alemana ideada para dominar al pueblo a través de la represión, las torturas y el terror
La Stasi, represión y control
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Madrid
Cinco años después del fin de la Segunda Guerra Mundial, en 1950, la República Democrática Alemana (RDA) creó la Stasi, una nueva organización secreta envuelta en la oscuridad, el tenebrismo y la violencia. Un cuerpo policial dedicado a la represión, que mantuvo al pueblo alemán sumido en el miedo durante 40 años, y cuyo modus operandi incluía vigilancias masivas, detenciones arbitrarias y torturas con el fin de extender el terror. Un organismo ideado y ejecutado en Alemania pero creado por tres hombres entrenados en la Guerra Civil Española.
Este fue un sistema que fue mucho más allá de Alemania, un cuerpo policial que controlaba perfectamente a toda la población, a la que obligaba a seguir la ley a rajatabla con técnicas muy meticulosas. Amir Valle, escritor y autor del libro El aliento del lobo, dedicado a la Stasi, ha explicado en SER Historia algunas de estas técnicas: "Registraban la basura de todo el pueblo alemán en busca de documentos, papelito a papelito". Con ello controlaban que la gente no confabulara contra el régimen comunista e implantaban el miedo en toda la población para controlarla. Un sistema en forma de telaraña cuyos creadores, sostiene Valle, "fueron las mismas personas que la Unión Soviética puso al frente de las brigadas comunistas en la Guerra Civil Española".
Estos tres hombres estudiaron y se formaron en la antigua Unión Soviética y crearon un engendro que, según Valle, "no solo controlaba a la sociedad, sino también la economía; se beneficiaban y buscaban recursos para el sistema por medios totalmente ilegales y oscuros". El fundador y artífice de todo fue Wilhem Zaisser, primer director del cuerpo policial y protagonista destacado de la Guerra Civil española al mando de la XIII Brigada Internacional bajo el apodo de General Gómez.
A este le asistió Erich Mielke, que actuó como agente secreto soviético en la zona republicana durante la Guerra Civil Española. Según algunos estudios sobre la época y su trayectoria, Mielke fue una de las figuras más importantes en el desarrollo de la Gran Purga, que se desarrolló entre 1936 y 1938 y que acabó con la vida de entre 700.000 y 1,2 millones de personas a las que el estado soviético consideró opositores o "contrarrevolucionarios". Esos mismos estudios señalan que, en España, Mielke participó también en las campañas de asesinatos para purgar las Brigadas Internacionales de supuestos anticomunistas.
Ernst Wollweber fue el tercer hombre involucrado en la creación de la Stasi. Pasó varios años como fugitivo por Europa y estaba condenado a una muerte segura en Alemania si era atrapado, por sus acciones contra los barcos de las naciones fascistas que navegaban en Escandinavia. En su constante huida, se convirtió en proveedor de armas para el bando republicano. Detenido en Suecia en 1940, fue condenado a tres años de cárcel pero finalmente liberado gracias a que recibió la nacionalidad soviética mientras estaba en prisión.
Todos ellos, después de este periplo, primero en la Unión Soviética y después con formación práctica en la Guerra Civil, explica Valle, "se especializaron y crearon una red internacional de contactos socialistas tan fuerte que la propia KGB rusa empezó a utilizarla". Fue entonces cuando volvieron a Alemania y formaron la Stasi, algunos de cuyos tentáculos siguen todavía vivos en regímenes totalitarios de Oriente Medio o Latinoamérica.