El Barça y la grada de animación buscan el entendimiento

El Barça y el Espai d'Animació del Camp Nou, ahora en Montjuïc, han acercado posturas para rebajar la tensión que existe entre ambas partes. Hace unos días, el club remitió a los grupos de animación que forman este espacio una carta en la que les hacían responsables de las multas de la pasada temporada por mal comportamiento. Unas multas que ascienden a 21.000 euros, mayoritariamente por insultos corales producidos durante partidos en el Estadi Olímpic Lluís Companys.

Esta medida cogió con el pie cambiado a los grupos del Espai d'Animació, que quedaron "estupefactos" después de que el club les hiciera pagar, por primera vez, estas sanciones impuestas por la Liga y la Generalitat de Catalunya. La primera reacción fue dejar de animar al equipo durante los primeros 15 minutos del derbi ante el Espanyol.

A partir de esa reacción, por eso, las tensiones se han intentado relajar. La voluntad de ambas partes es el entendimiento y, con este objetivo como base, sentarse a hablar y negociar. La grada de animación considera injusto tener que pagar los 21.000 euros, creen que pagan justos por pecadores e insisten en que no todos los cánticos ofensivos tienen como punto de origen su espacio. Y el club, lo que quiere, es que en la grada se eliminen definitivamente los insultos y los cánticos ofensivos para acabar con las denuncias. El diálogo entre las partes está en marcha.