Fútbol

Míchel asegura que es "raro" que el árbitro no diera como bueno el penalti de Stuani contra la UD Logroñés

¿Entró el penalti de Stuani en el UD Logroñés-Girona de Copa del Rey?

El lanzamiento de penalti de Stuani contra la UD Logroñés / Movistar+

El Girona cayó eliminado ante la Unión Deportiva Logroñés en Copa del Rey en una tanda de penaltis en los que sobresale el hito de Pol Arnau, lateral derecho del equipo riojano que tuvo que ser el portero de su equipo y que paró el lanzamiento clave a Abel Ruiz. Hijo de Arnau, guardameta del Barça fallecido, dejó una de las historias del campeonato. "Ha sido gracias a mi padre. Es un ángel que tengo en el cielo", confesó en los micrófonos de El Larguero.

Sin embargo, no fue la única historia que ha trascendido de esta tanda de penaltis en el Estadio Municipal Las Gaunas. Stuani falló el suyo, pero hay dudas sobre si su lanzamiento, que rebotó en el larguero, entró o no. Míchel Sánchez, técnico del Girona, fue el primero en avisar de esta duda que ahora se habla con fuerza en redes sociales. El catalán consideró "raro" que el árbitro no diera como bueno el penalti de Stuani. "Para mí el bote ha sido dentro de la portería es lo que se ve en la televisión", ya que en esta competición no hay tecnología de gol. "aunque sea fútbol profesional", criticó el entrenador.

No obstante, Míchel admitió que el Girona no fue superior al Logroñés y que esta eliminación es "un golpe duro”, y destacçó que su equipo no fue superior a su rival, que es de Segunda RFEF "pero en el campo no se ha visto la diferencia de categoría".

"No hemos estado finos y ellos han estado muy bien y han sabido defender bien", continuó. Además tampoco dio importancia al hecho de dar presencia a jugadores poco habituales en el equipo "porque no tengo ni titulares ni suplentes, tengo un equipo". Aún así, Míchel Sánchez aseguró que el conjunto catalán "tenía muchas ilusiones puestas en la Copa del Rey" por lo que lamentó la eliminación y aceptó "todas las críticas que puedan venir".

Pol Arnau, héroe de la UD Logroñés

Ver a un lateral izquierdo como portero no es nada habitual, pero Pol Arnau se convirtió en el héroe de la noche bajo palos. Durante el partido, el guardameta titular se lesionó y la UD Logroñés no tenía cambios disponibles. El lateral fue directamente a por su entrenador a pedirle que debía ser él el portero hasta el final del partido, y por ende, en los penaltis. "Me he ido al banquillo y le dije al míster que me pusiera a mí. Le he insistido tanto que me ha tenido que poner", desveló en El Larguero.

El joven de tan solo 19 años explicó que lo de ponerse de portero no es nuevo para él, sabiendo además que su padre fue guardameta del Barça, también lo es actualmente su hermano. "En el colegio había jugado alguna vez como portero. Me puse todo el entrenamiento de portero y mi padre me echó una bronca después de ese entrenamiento, que no quise volver a jugar", dijo. Arnau aseguró también que son "muchas" las "emociones que pasan por su cabeza" después de vivir un momento tan surrealista, y aseguró que su padre le ayudó desde el cielo.