Ciencia y tecnología

Descubren a 7.900 metros de profundidad un raro crustáceo depredador en la fascinante fosa oceánica de Atacama

La zona abisal del océano, oscura y bajo intensa presión, parece inhabitable, pero allí habitan decenas de organismos únicos

'Dulcibella camanchaca', primer anfípodo depredador de gran tamaño descubierto en la Fosa de Atacama a 7.900 metros de profundidad.

Madrid

Un equipo de científicos ha descubierto una nueva especie de crustáceo a cerca de 7.900 metros de profundidad en la Fosa de Atacama, en Perú y Chile. La especie, bautizada como Dulcibella camanchaca, es el primer anfípodo depredador de gran tamaño y activo en esas profundidades extremas, según un estudio publicado en la revista Systematics and Biodiversity.

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La zona abisal del océano, caracterizada por la oscuridad y la intensa presión, parece inhabitable, pero allí habitan decenas de organismos únicos. Cada especie descubierta allí aporta una pieza crucial al rompecabezas de cómo la vida ha evolucionado e incluso prospera en uno de los entornos más extremos de la Tierra.

"Dulcibella camanchaca es un depredador de nado rápido al que bautizamos con el nombre de Oscuridad en las lenguas de los pueblos de la región de los Andes para significar el océano profundo y oscuro del que depreda”, según Johanna Weston, ecóloga del Institución Oceanográfica Woods Hole (Estados Unidos) y coautora principal del estudio.

Fascinación de los científicos

Este crustáceo, de casi cuatro centímetros de longitud, utiliza apéndices rapaces especializados para capturar y depredar especies de anfípodos más pequeños en el reino de alimentos limitados de la Fosa de Atacama. Esa fosa se extiende a lo largo del este del Pacífico Sur, se hunde a profundidades que superan los 8.000 metros frente a la costa del norte de Chile y ha fascinado a los científicos durante mucho tiempo.

Ubicada debajo de aguas superficiales productivas y ricas en nutrientes y geográficamente remota de otros entornos hadales, la Fosa de Atacama alberga una comunidad distintiva de especies nativas. "Lo más interesante es que los datos de ADN y morfología apuntaron a que esta especie también es un nuevo género, lo que pone de relieve que la Fosa de Atacama es un punto crítico endémico", continúa Weston.

Los investigadores recogieron cuatro individuos de Dulcibella camanchaca a una profundidad de 7.902 metros utilizando un vehículo de aterrizaje, que es una plataforma sin ataduras que se usa para transportar equipos científicos, incluidas trampas con cebo, hacia y desde el fondo del océano. Una vez a salvo en la cubierta del barco, los anfípodos recuperados se congelaron y luego se sometieron a un análisis morfológico y genético detallado en la Universidad de Concepción (Chile).