La justicia reabre una investigación contra los coeditores de la revista Mongolia por su portada de un belén satírico
La portada en cuestión muestra un pesebre navideño y en el centro una caca como la que se utiliza en las aplicaciones de mensajería
Imagen de la portada del número de diciembre de la revista satírica Mongolia
La Audiencia de Barcelona ha ordenado investigar a los tres coeditores de la revista satírica Mongolia por un delito de ofensas a los sentimientos religiosos por la portada de 2022 que satirizaba un belén. La justicia, así, ha ordenado la medida a raíz de una querella pasada emitida por la organización Hazte Oír.
Según ha informado la revista en un comunicado, el tribunal ha revocado la decisión del juzgado de instrucción número 4 de Mataró, que rechazó admitir a trámite la querella de Hazte Oír, y ahora ha ordenado investigar a los coeditores, que deberán comparecer como imputados el próximo 25 de junio.
Esta medida de la organización tuvo lugar después de que la revista satírica mostrase un pesebre navideño en cuyo centro había un excremento, representado como el incono que se utiliza habitualmente en la aplicación de mensajería. "Ha nacido el hijo de Dios. Es igual que su padre", se podía leer en la portada de la revista, que ha sido objeto de otras tres querellas que fueron ya archivadas por la Justicia. Estas denuncias, que motivaron la imputación de los coeditores de Mongolia, habían sido presentadas por los colectivos Abogados Cristianos, Manos Limpias y Comunidad Tradicionalista.
La revista tacha de extraña la reapertura de la investigación
Mongolia, por su parte, ha considerado "extraña" la reapertura de la causa por unos hechos que la justicia ha descartado delictivos hasta en tres ocasiones. Esta situación, a su parecer, ha demostrado "hasta qué punto es necesario un proyecto satírico nacido con el objetivo de ensanchar los márgenes de la libertad de expresión en España en un momento de claro retroceso como consecuencia del auge del matonismo judicial ultracatólico", según han apostillado en el citado comunicado.
La revista, asimismo, ha acusado al ultracatolicismo de estar imponiendo "su visión totalitaria" y de propiciar la autocensura a través de la continua presentación de querellas, que no buscan tanto prosperar". Al mismo tiempo, Mongolia ha lanzado una campaña de micromecenazgo para producir una serie de podcasts con entrevistas a fondo que permitan "desentrañar la madeja del matonismo judicial ultracatólico", tal y como han adelantado ellos mismos.
Fue en enero del pasado año cuando un juez de Barcelona archivaba la causa abierta contra los editores. En aquel momento, la Justicia argumentaba que la sátira quedaba amparada por el derecho a la libertad de expresión, puesto que este constituía "una crítica a una festividad de una gran relevancia social".
