¡Es una de las paradas de la temporada!: Gazzaniga firma esta palomita para evitar una goleada del Barça en la primera parte

El Girona ha conseguido resistir, prácticamente hasta el descanso, sin encajar goles en Montjuic. El hecho es toda una hazaña en sí, porque la posesión ha sido enteramente del FC Barcelona (72%-28% para los locales), al igual que las múltiples ocasiones, algunas de ellas clarísimas. Por si esto no fuera suficiente, el Barça ha llegado a reclamar un penalti de Asprilla sobre Fermín y, además, Koundé ha visto como su gol quedaba anulado por fuera de juego. Sin embargo, el gran protagonista y culpable de que los de Míchel hayan llegado con sólo 1-0 al descanso ha sido Paulo Gazzaniga.

El portero argentino ha demostrado una auténtica exhibición de reflejos con hasta cuatro buenas intervenciones sólo en la primera mitad. El guardameta del Girona ha evitado el gol de Lamine tras una jugada maradoniana del joven extremo y ha detenido otro disparo clarísimo de Lewandowski desde la frontal del área. Sin embargo, su parada más espectacular ha llegado a la salida de un córner, cuando Araujo ha superado a su marca para rematar al palo largo con un potente testarazo. Gazzaniga se ha estirado con toda su estatura y ha llegado a meter la punta de los dedos, lo suficiente para que el balón se marchara rozando el poste.

El mismo central uruguayo no podía creerse que su remate, tan colocado como potente, no hubiera entrado entre los tres palos tras botar justo delante del meta argentino, que, con cierta fortuna, conseguía evitar por centímetros la llegada de Lewandowski al segundo palo. En total, la primera parte deja un balance de 10 disparos (4 entre palos) para el FC Barcelona y 2 disparos (ninguno entre palos) para el equipo visitante.

A pesar de sus milagrosas intervenciones, Gazzaniga no ha podido hacer nada para evitar el 1-0 que finalmente ha llegado en el 43'. Tras un centro de Lamine Yamal, Eric García ha rematado al borde del área pequeña. Sin embargo, su remate se ha encontrado con el central del Girona, Krejci, que ha desviado el balón lo suficiente para hacer imposible la estirada del portero argentino.