Rubén Rivera rompe su silencio en 'Carrusel' tras ser absuelto en el caso Rubiales: "Nunca sentí que Jenni estuviera desprotegida"

Quien fuera director de marketing de la Federación Española de Fútbol, Rubén Rivera, se ha pasado por Carrusel Deportivo para hablar con Antón Meana sobre el caso de Luis Rubiales y Jenni Hermoso, en el cual fue uno de los acusados y recientemente absuelto de un supuesto delito de coacciones.

Se acabó es el eslogan que tenían las jugadoras después de todo lo ocurrido, pero para él se trata del cierre de un documento que mandó a Pedro Rocha "cuando empezó a salir mi nombre en la prensa", y ahí "les expliqué" lo que había pasado con las jugadoras y diciendo que "no podía ser que alguien estuviera culpando a alguien que no había hecho nada que en este caso era yo", y era una manera de que "se acaba el que estuvieran difamando mi nombre y perjudicando mi reputación".

Su nombre aparece junto al de Albert Luque después de la famosa asamblea de Luis Rubiales en la que decía que no iba a dimitir, porque supuestamente algunas jugadoras decían que habían ido a Ibiza a presionar a Jennifer Hermoso. Esto le resultó bastante sorprendente porque "yo llevaba trabajando desde la vuelta de Ibiza con absoluta normalidad y nadie me había dicho nada" y es en ese momento cuando decide redactar el documento que mencionaba, y al compartirlo con Pedro Rocha les pidió que "lo compartan con todos los miembros de la Junta Gestora", aunque no puede confirmar si ellos lo llegaron a leer.

En el aportaba "todos los mensajes que yo había intercambiado con las jugadoras durante esos días", y en ellos se puede leer que la relación es de "profesionalidad y de cordialidad en la que ellas valoran continuamente mi trabajo". Rivera era el que se encontraba al cargo de conseguir tanto los billetes de avión como en entradas para diversos eventos.

"Jennifer Hermoso nunca me acusó de coacciones", decía al ser preguntado sobre la razón de porque las jugadoras le señalaron, sino que "fue la propia fiscalía la que empieza a crear la acusación de supuestas acusaciones y se incorpora a la causa", y su participación real en el juicio era como "testigos a declarar" y paso directamente como "investigados", y así fue como tuvieron que participar. De todo lo que ocurrió ahí le sorprendió que "cuando vas viendo que la misma persona según acude a declarar va contando cosas distintas y cuanto más tiempo pasa respecto a los hechos acaecidos se cuentan más infundios, es muy duro".

Además reiteraba en que "jamás" había sido insistente con Jennifer Hermoso, pero que al igual que la jugadora coincidía que apenas había hablado con ella dos veces. También fue preguntado por la posibilidad que Luis Rubiales estuviera más protegido que la delantera durante el juicio, pero la respuesta que ofrecía es que "no sentí que estuviera desprotegida", y la razón es por la manera de hablar que tenía durante los días de Ibiza.

Después de toda la información que entregó a la Federación "siempre tuve muy claro que no iba a ser despedido", de hecho, le suspende de empleo, pero aun así "siempre pensé que tendría una audiencia para preguntarme sobre los hechos", pero la realidad es que en el mes de mayo fue definitivamente cesado, algo que resultó sorprendente para Rubén Rivera y además cuenta que se les preguntó nada, por lo que "tengo muy claro que el despido es completamente nulo por vulnerar la presunción de inocencia".

A pesar de todo su objetivo es el de volver a la Federación y se defiende en que no es la primera vez en que vuelven a recontratar a un empleado después de un despido el cual considera nulo, incluso comenta como le dijo a Pedro Rocha que si hacía falta no era necesario volver a tener el mismo puesto que tenía antes, ni la misma relación con las jugadoras, y para él volver se trata de una razón de "justicia".

El momento en el que se conoció la noticia de su absolución se encontraba comiendo junto a su familia y lo definió como algo muy "especial", aunque a diferencia de Luque pudo contener las lágrimas, pero fue una manera de decir "por fin se ha demostrado lo que hemos vivido". Fueron muchas las llamadas que recibió por parte de amigos y familiares para celebrar la resolución del caso. Con una de las personas con las que pierde contacto es con Rubiales, que deja de ser su jefe y deja de hablar todos los días.

Como mensaje final para Jennifer Hermoso le quiere decir que "me sorprende que me hayan involucrado cuando saben perfectamente quien es Rubén Rivera y cómo ha tratado siempre a las jugadoras de la Selección", aunque todavía es "inevitable pensar" si realmente todo esto ha servido para algo.