La maniobra de los bomberos para apagar incendios en coches híbridos y eléctricos ante la complicación que supone extinguir esos fuegos
Los recientes casos de incendios en este tipo de vehículos ponen de manifiesto la necesidad de buscar soluciones alternativas a la extinción convencional de fuegos
La maniobra inédita de los bomberos para apagar el incendio en un coche híbridos siniestrado en Zumarraga (Gipuzkoa).
Madrid
El incendio de un coche eléctrico en un garaje de Alcorcón (Madrid), que ha terminado en tragedia, ha vuelto a poner el foco sobre el riesgo de este tipo de vehículos en caso de incendio. En esta ocasión, han muerto dos bomberos por culpa de las llamas, pero en los últimos meses también han ardido en Madrid otros cuatro turismos enchufables en tres incendios diferentes, sin unas consecuencias tan graves.
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Además, la semana pasada una persona falleció tras empotrar su coche contra un caserío en Zumarraga (Gipuzkoa) y, tras el impacto, el vehículo, híbrido en este caso, comenzó a arder. El asunto de los incendios de los coches híbridos y eléctricos es polémico y, tanto ayuntamientos como cuerpos de bomberos, ya se han puesto a debatir cómo resolverlo.
Apagar este tipo de fuegos no suele ser precisamente fácil. Si ya es duro gestionar los momentos posteriores al rescate de las personas involucradas en un accidente, en el caso de un coche eléctrico el tema se complica.
¿Por qué es tan difícil apagar el incendio de un coche eléctrico?
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Temperaturas elevadísimas
Si la estructura de la batería se daña, puede producirse lo que se conoce como escape térmico. Las baterías empiezan a sobrecalentarse a temperaturas elevadísimas, haciendo arder los componentes plásticos que las rodean y provocando una reacción en cadena sobre cada celda adyacente.
Los coches híbridos se alimentan de gasolina, pero también son eléctricos, por lo que cuentan con una batería de litio que, en caso de incendiarse, presenta grandes complicaciones para extinguirlo. A diferencia de un coche tradicional, uno híbrido está equipado con baterías y módulos que pueden provocar nuevas reacciones químicas si se incendian o tienen un comportamiento anormal.
Echar agua y esperar a que se apague no es suficiente, ya que se necesita que la batería, ubicada debajo de los asientos traseros, se enfríe. Ese proceso requiere horas de trabajo que pueden llegar a ser días. La única manera de extinguirlo es meter el coche en el agua, sumergirlo y dejarlo ahí un par de días, hasta que sea seguro terminar la actuación.
Los bomberos de la Diputación de Gipuzkoa tuvieron que enfrentarse a esta situación en el caso de Zumarraga. Pidieron un contenedor para rellenarlo de agua y meter el vehículo en él. Sin embargo, no es tan sencillo como parece, porque el contenedor debe ser estanco, para que no haya fugas de agua, y el primero que les llegó no cumplía esos requisitos. Sí que lo lograron con un segundo contenedor.
El objetivo es que el fuego se ahogue cubriendo de agua al menos hasta la altura de la batería de litio, un material con alta reactividad y que reacciona con el agua. Algunos cuerpos de bomberos ya han empezado a disponer de una bañera especial para apagar incendios en coches eléctricos.
