Dos expertos descubren un manuscrito oculto de Quevedo en el que relata los abusos de poder del Conde-duque de Olivares
En la obra, oculta durante siglos en los Archivos Nacionales de Francia, el escritor del Siglo de Oro advierte al caballero don Fadrique de Toledo sobre los peligros del orgullo y la arrogancia del poder

Francisco de Quevedo

El repertorio de obras literarias de Francisco de Quevedo, uno de los mayores exponentes de la literatura española y componente de los escritores del Siglo de Oro, es uno de los más extensos de España, y desde hace unos días ha aumentado su número en uno más. Esto se debe gracias al descubrimiento de un manuscrito del famoso escritor que se encontraba oculto durante siglos en los Archivos Nacionales de Francia.
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En concreto, el catedrático de Literatura Española de la Universidad de Santiago de Compostela (USC), Antonio Azaustre Galiana, y el profesor José Manuel Rico García, de la Universidad de Huelva; hallaron dicho texto titulado, 'Desconsuelos de los dichosos para que reconozcan los peligros de serlo y sepan prevenirlos'. En la obra, escrita el 20 de agosto de 1633, durante su retiro en Villanueva de los Infantes, Quevedo advierte al caballero don Fadrique de Toledo sobre los peligros del orgullo y la arrogancia del poder, en referencia al Conde-duque de Olivares, valido del rey Felipe IV, y de quién se ha sospechado durante siglos que el escritor estaba enfrentado.
"No nos consta que tuviera relación directa con él, pero Quevedo le admiraba", señalan los investigadores sobre la correlación entre ambos personajes históricos. Durante el recorrido de la obra, el autor madrileño carga duramente contra Olivares sin mencionarle de forma directa.
"Es un texto político importante, que confirma de manera muy directa y con una violencia bastante explícita el enfrentamiento que mantenía desde hacía tiempo con el conde-duque de Olivares. Una decepción que era muy evidente, y por muchas causas, en 1633. Quevedo había pertenecido siempre a la facción nobiliaria que se oponía a la familia del valido, aunque en alguna ocasión había colaborado con él. El texto también estuvo motivado por la decepción que sufría por la deriva de la Monarquía y el Imperio español, que en esas fechas era muy grande", añade Azaustre.
La crítica sobre el Conde-duque
Pese a que Quevedo no llega a citar el nombre del Conde-duque, los expertos han señalado que la obra hace clara referencia al valido del rey debido a ciertas frases que aluden a su figura. "La venganza es como la abeja, que, por dar una picadura que se quita con el lodo, se da la muerte. ¡Qué de poderosos he visto que, si perdonaran pequeños disgustos, se perdonarán a sí mismos graves desdichas!", reza el autor en una de sus frases.
Uno de los argumentos por los que el célebre escritor carga contra del Conde-duque se debe a la decisión de este de coger a los judíos portugueses como prestamistas de la Corona en lugar de los genoveses. En general, la obra se refleja como un diálogo entre el sentido y la razón, y en ella advierte de los peligros de la soberbia y la caída inevitable de los poderosos que ignoran la omnipotencia de Dios.
Los catedráticos añaden que el manuscrito hace referencia a la obra 'Los remedios de cualquier fortuna', atribuida a Séneca, que Quevedo tradujo y comentó en antaño. Según los autores, el texto fue copiado en la segunda mitad del siglo XVII, poco después de que el autor del Siglo de Oro escribiera el original.




