Los avales públicos para comprar vivienda se quedan lejos del objetivo del Gobierno: llegan al 6% de los potenciales beneficiaros

Madrid

Los avales para la compra de la primera vivienda se aprobaron en febrero de 2024 para facilitar la compra de la primera vivienda a los jóvenes menores de 35 años y familias que no han podido ahorrar lo necesario para acceder a una hipoteca. Sin embargo, más de un año después de entrar en vigor, el Instituto de Crédito Oficial (ICO) ha financiado 3.199 operaciones hipotecarias, muy lejos de las 50.000 personas a las que el Gobierno aseguraba querer ayudar con esta medida hasta mediados 2026.

El plan está dotado con 2.500 millones de euros y hasta el momento el ICO ha concedido financiación por valor de 391,1 millones: es decir, poco más del 15% del total.

Esta ha sido una de las medidas estrella del ejecutivo en materia de vivienda con el doble objetivo de mejorar el acceso a los jóvenes y aliviar, al mismo tiempo, el mercado del alquiler en las zonas más tensionadas. Por regla general, para adquirir una vivienda con financiación bancaria, un comprador debe tener ahorrado aproximadamente el 30% del precio del inmueble. El 70% restante se reparte entre el importe por el que se concede el crédito hipotecario y los gastos bancarios e impuestos asociados a la transacción (normalmente un 10%).

Con estos avales, que siguen en vigor hasta 2026, el Gobierno prevé dar cobertura hasta al 25% de ese crédito, de forma que los solicitantes pueden obtener una hipoteca de hasta el 100% del valor del piso. Es decir, pueden acceder al crédito sin necesidad de tener ahorrada la cantidad de la entrada. Sin embargo, los bajos ingresos de los solicitantes y el endurecimiento de las condiciones de financiación por parte de los bancos cuando los solicitantes se adhieren a estos avales están obstaculizando el despliegue de las ayudas.

El ritmo se acelera en los últimos meses

Para garantizar el despliegue de las ayudas, las entidades bancarias tienen que adherirse a esta línea de avales. Las principales comenzaron a comercializarlas pasado el verano y esta demora explica, según fuentes del Ministerio de Vivienda, que los avales estén tardado en desplegarse.

Desde el Gobierno insisten en que la cifra se ha acelerado en los últimos meses -de hecho, el ritmo de concesión se ha más que duplicado de enero a abril de 2025- y confían en que vaya a más hasta 2026, cuando finaliza el programa. Cuando se puso en marcha el ejecutivo aseguró que la medida podría prorrogarse hasta diciembre de 2027 "en función de la demanda".