El móvil de Luka Doncic pagó su ataque de ira cuando conoció su traspaso a los Lakers: "Mi corazón se rompió"

Ya asentado como nueva estrella de Los Ángeles Lakers, Luka Doncic se ha sincerado para arrojar aún más luz sobre cómo vivió ser protagonista involuntario del traspaso más mediático de la temporada en la NBA. El esloveno, focalizado hasta enero en echarse a su espalda a unos Dallas Mavericks que meses atrás habían acariciado el anillo de campeón, sufrió un revés inimaginable el 1 de febrero. Su club anunció su traspaso a Los Ángeles Lakers después de unas negociaciones en la sombra que sorprendieron incluso a los jugadores implicados. Doncic se enteró del cambio de aires cuando ya estaba todo acordado y, en contra de su voluntad, se vio obligado a emprender un nuevo rumbo.

Meses después de haber asumido el golpe y reencauzando sus objetivos hacia una nueva gloria vestido de púrpura y dorado, el jugador esloveno se ha abierto en una entrevista para la ESPN en la que incluso mostró las primeras consecuencias del ataque de ira con el que asumió la noticia. Se enteró de que había sido traspasado mientras veía una película en la cama y, en una reacción de lo más irracional, lanzó con fuerza su iPhone. El móvil quedó destrozado y, como prueba de ello, tuvo la oportunidad de mostrarlo a una cámara que captó el destrozo.

Tratando de verbalizar sus sensaciones en estos momentos, Doncic explicó el malestar que le removió por dentro: "Mi corazón se rompió, la verdad. Lo que sentía era, sobre todo, tristeza. Estaba en shock, un shock bestial", apuntó en esta charla, en la que no ocultó que su deseo era terminar su carrera en Dallas.

La ruptura, además, no se produjo con las mejores palabras de quienes habían sido su familia hasta hace poco. De hecho, el director general de los Mavericks, Nico Harrison, se ha empeñado desde entonces en defender su decisión dejando caer las malas rutinas que venía tomando Doncic y que lastraban sus condiciones físicas. Ante ello, el jugador aludido respondió también con un punto de lástima. "Es triste lo que están diciendo. Yo no he dicho nunca nada malo de Nico Harrison, solo quiero dejar esto atrás", comentó, optando por quedarse con sus buenas vivencias durante sus seis años y medio en Dallas y "pasar página" de esta salida que tanto le ha dolido: "Prefiero no responder. Intento no leer mucho y centrarme en mi viaje".