La gran revolución inacabada del papa Francisco: "Si hubiera hecho todo lo que quería se habría enfrentado a un cisma"

Madrid

El papa Francisco ha fallecido este lunes a los 88 años de edad en su residencia de Ciudad del Vaticano. Así lo ha dado a conocer el cardenal Kevin Joseph Farrell, Camarlengo de la Santa Romana Iglesia, desde la Casa Santa Marta, donde ha confirmado la muerte del argentino Jorge Bergoglio como consecuencia de una enfermedad con la que llevaba luchando desde hace ya varios meses: "Queridos hermanos y hermanas, con profundo pesar debo anunciar el fallecimiento de nuestro Santo Padre Francisco I. A las 7:35 de esta mañana, el Obispo de Roma, Francisco, regresó a la casa del Padre".

El papa muere y con él, una revolución inacabada con la que ha tratado de reformar la iglesia por completo. En declaraciones al Hoy por Hoy de la Cadena SER, Javier Cercas ha llegado a la conclusión de que Jorge Bergoglio ha cambiado cosas muy importantes dentro de la iglesia: "La gran revolución del papa Francisco es volver al Vaticano II, que es el gran concilio de finales de los 50 y principios de los 60. Y lo que pretendía este hombre era volver al cristianismo más primitivo, el cristianismo de la austeridad".

La gran revolución del papa

Algo sobre lo que ya venía avisando cuando era uno de los candidatos a suceder al Papa Benedicto XVI: "A este hombre le preguntaron qué quería hacer y dijo que quería sacar a Cristo de la sacristía y ponerlo en la calle. Quería volver al cristianismo radical de los orígenes, porque Cristo era un radical. El papa Francisco abogaba por el cristianismo de los pobres, de la gente desgraciada, no de los ricos, no de los poderosos. Y eso implica una cantidad enorme de cosas".

De esta manera, el papa Francisco ha estado luchando desde el primer día contra la iglesia con el objetivo de volver a las raíces del cristianismo: "Este hombre ha intentado una gran revolución, pero no la ha acabado, porque es imposible". Principalmente, porque se ha encontrado con muchos muros que le han impedido seguir más allá: "No ha hecho más, pero no porque no le hayan dejado hacer más, sino porque se ha dado cuenta de que la iglesia es una cosa muy compleja y universal".

Los muros del papa

Tanto que probablemente no pudo hacer todo lo que hubiese querido: "Este papa, que era un hombre muy político, se ha dado cuenta de que determinados sectores de la iglesia no estaban preparados para algunos cambios que quería llevar a cabo. Si hubiera hecho todo lo que hubiese él querido, se habría enfrentado a un cisma. Ha habido grandes resistencias en muchas iglesias, empezando por la española, a los cambios que ha llevado a cabo".

Entonces, el papa Francisco optó por cambiar lo más básico para posteriormente ir extendiendo su labor y su forma de entender el mundo a otros ámbitos: "El papa Francisco se dio cuenta de que no podía hacer todos esos cambios y, como el hombre prudente que fue a lo largo de su vida, no los llegó a ejecutar".