Informe Xabi Alonso: el libreto del futuro técnico del Real Madrid, construido a través de extractos suyos en varias entrevistas

Xabi Alonso tiene mucho trabajo por delante en el Real Madrid, pero si algo ha demostrado el técnico tolosarra es ser un entrenador muy especial. Ha vivido, sobre todo, éxitos en los banquillos, pero también algunos sinsabores que le han ayudado a crecer como técnico.

Consiguió el ascenso con el filial de la Real Sociedad a Segunda División y, un año después, vio como sus chicos perdían la categoría. Lo fichó el Leverkusen. Las dos primeras temporadas fueron de ensueño, formidables. Resucitó a un equipo que parecía muerto en la primera campaña, y no solo lo salvó del descenso, sino que lo clasificó para la Europa League. En la segunda, consiguió un doblete histórico en la segunda temporada arrebatándole el título al todopoderoso Bayern de Múnich.

Xabi Alonso no va a ser la cura para todos los males del Real Madrid, pero en su mochila tiene el haber trabajado con futbolistas jóvenes —lo hizo en la Real Sociedad y lo ha hecho hasta ahora en el Leverkusen—, ha hecho de Florian Wirtz una estrella mundial, ha sido versátil en su pizarra —no le ha costado cambiar su sistema—, ha sido elástico a la hora de trazar planes concretos de partido y, por encima de todo, ha demostrado ser un entrenador ganador. ¿Pero qué tipo de entrenador de Xabi Alonso? Así es la pizarra del técnico que se hará cargo del Real Madrid tras el próximo adiós de Carlo Ancelotti.

“El impacto que ha tenido en el Leverkusen ha sido increíble. Creo que todos los entrenadores que hemos tenido la oportunidad de tenerlo como entrenador ya veíamos que iba a ser un gran entrenador. Lo de después ya lo sabéis. Se fue a Alemania y se enfrentó cara a cara, cosa que es muy difícil, con el Bayern de Múnich y estuvo invicto hasta el último partido del año ante Atalanta en la final de la Europa League. Y luego está su camino, su manera de jugar, la forma en la que ha mejorado a sus jugadores. Creo que en el Bayern Leverkusen estarán muy orgullosos de estos casi tres años de unión”. Estas palabras son de Josep Guardiola, técnico del Manchester City y que tuvo a Alonso a sus órdenes en su etapa en Múnich.

El gran reto de Xabi

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Informe Xabi Alonso: su pizarra a través de sus declaraciones

Y es que el vasco ha trabajado a las órdenes de algunos de los mejores entrenadores de los últimos 25 años. Aprendió el antídoto al fútbol de Guardiola incluso antes que el juego de Pep, conoció el rigor y la minuciosidad de Rafa Benítez, la capacidad para minimizar las virtudes de los rivales que han tenido siempre los equipos de José Mourinho, la practicidad y el sentido común de Ancelotti… De todos ha aprendido mucho Xabi Alonso, pero a la vez es un técnico con mucha personalidad, con un libreto propio y que se adapta a lo que tiene. Más allá de que le guste un tipo de fútbol en concreto, mira la plantilla que tiene y adapta el modelo de juego a lo que ve.

“Te tienes que adaptar a los jugadores que tengas con tus principios y tus ideas. Hay equipos con los que, por ejemplo, no puedes jugar a la contra. Nosotros en la selección con Silva, Iniesta o Villa no podíamos jugar a la contra. Son grandes jugadores, pero a 50 metros de la portería no son tan peligrosos. Son peligrosos cerca del área (...) Ahí planteas un juego posicional, planteando superioridades… En el Real Madrid era diferente. Con Bale, Ronaldo, Benzema y Di Maria a 50 metros de la portería éramos peligrosos porque había espacios que podíamos aprovechar. Eso lo marcan los jugadores que tengas”.

—  Xabi Alonso, durante su entrevista en 'Universo Valdano'.

¿Con qué sistemas ha jugado Xabi Alonso? Normalmente ha jugado con tres centrales y carrileros, bien en un 3-4-3 o un 3-2-4-1. Pero, más allá del sistema, la clave está en dónde puede encontrar los espacios cada partido y, a partir de ahí, tener una estructura que pueda hacer daño al rival. Ha cambiado mucho de esquema, incluso a jugar con cuatro atrás, pero para él la estructura pura y dura no es lo más importante.

“No hablamos mucho de esquemas: 3-4-3, 3-2-4-1… Esto va más sobre qué puedo hacer para que pase lo que yo quiero en el partido y cómo podemos conseguir ventaja para ello. Debes tener en cuenta las características de tus futbolistas y cómo puedes obtener beneficios de ellas”.

—  Xabi Alonso, durante una entrevista en el canal de Bundesliga.

Sobre los sistemas, las estructuras y el dibujo táctico del equipo, es un técnico que pide a los jugadores que incluso dentro de un mismo partido les pide a sus jugadores que actúen en diferentes posiciones. Basta con ver un partido de su Leverkusen: Hincapié ha sido central zurdo y carrilero en un partido; Grimaldo ha sido lateral y centrocampista; Frimpong que es un carrilero ha sido delantero en muchas fases… De esta manera consigue un equipo muy camaleónico, capaz de cambiar de esquema y estructura durante los 90 minutos. Dentro de sus líneas maestras está la versatilidad de sus jugadores.

“A veces con Frimpong jugamos abierto alto y es un extremo. Si lo queremos bajo es carril. Grimaldo es lateral bajo o mediocampista. Tenemos jugadores que dan más estabilidad y otros que dan más desequilibrio. Tratamos de combinar eso”.

—  Xabi Alonso, durante su entrevista en 'Universo Valdano'.

Él era centrocampista, uno de los mejores mediocentros que hemos tenido este siglo. Le gusta que sus equipos tengan cierto control. Hay una anécdota que explica el propio Xabi Alonso en varias entrevistas. Cuando llega a Leverkusen, no hay una figura que sea la manija del equipo, algo similar a lo que le ha pasado al Real Madrid tras la marcha de Toni Kroos. Se pasaron los meses antes de verano buscando la mejor opción para darle un Xabi Alonso a Xabi Alonso. Acabaron firmando a Granit Xhaka y fue un acierto total. Eso cambió por completo el modelo del primer año.

“Yo quería ver si éramos capaces de manejar desde el centro del campo, de tener jugadores que no quisieran llegar demasiado rápido, sino que, a través del control, de muchos pequeños pases, tuvieses el manejo del partido y que, a partir de ahí, pase lo que tenga que pasar”.

—  Xabi Alonso, durante su entrevista en 'Universo Valdano'.

Xabi Alonso es un enamorado del control, algo que heredó de Guardiola, pero hay que decir que sus equipos no abusan del lado a lado. Intenta que siempre haya un mínimo de verticalidad. De hecho, coloca bastantes piezas por dentro. No es una anomalía ver incluso como sus carrileros se meten al centro del campo. Intenta que haya muchas líneas de pase dentro. Xhaka se ha hartado de meter pases verticales en los dos años que ha estado con Xabi Alonso. En líneas generales le gusta salir jugando desde atrás, involucra incluso al portero en la salida de balón para generar superioridades. Le gusta presionar alto y robar arriba. Pero, y esto es bastante de Mourinho, adopta plan de partido específico. Es decir, si se enfrenta al Bayern de Múnich no le importa regalar la pelota y ser más reactivo.

“Hemos tomado muy buenas decisiones a la hora de presionar: dónde y cómo hacerlo. Por eso hemos sido capaces de tener controlado el partido la mayoría de las veces sin el control del balón. Esto no nos pasa muchas veces, no tener la pelota, pero tenemos que estar listos cuando nos pase y somos un mejor equipo si sabemos jugar de diferentes maneras”.

—  Xabi Alonso, en una entrevista tras vencer al Bayern en Bundesliga.

Además. Es un técnico hiper competitivo, un enamorado de ganar. Con Xabi Alonso vamos a ver un Real Madrid mucho más táctico, con una mayor preparación específica de los partidos, pero eso no está reñido con competir. Quiere ganar títulos y no va a dejar que un exceso de táctica se coma la competitividad del equipo. Quienes le conocen cuentan, además, que es un gran motivador.

“La Champions es de jugar bien, pero de competir mejor todavía. Eso es lo que queremos. Saber en cada momento qué es lo que necesitamos por supuesto con nuestra forma de jugar, con nuestras calidades tanto de juego como mentales. Hay que intentar aglutinarlas para ser lo más competitivos posibles”.

—  Xabi Alonso, en una rueda de prensa de Champions League.

Otra de las claves la explica la figura de Wirtz. Cuando llega a Leverkusen detecta perfectamente quién es el jugador diferencial y le genera un contexto casi perfecto, ideal: un nueve que fija a los centrales para que tenga espacio para recibir entre líneas; jugadores muy rápidos que van bien al espacio para alimentar su último pase… Le ha convertido en un crack mundial. La clave es ver cómo va a reaccionar ante un vestuario lleno de estrellas. No lo ha tenido como entrenador, pero no se puede obviar que se ha movido como jugador en vestuarios así.