Starmer anuncia un plan para reducir la inmigración: "Quienes vengan a nuestro país deben comprometerse a integrarse"

El primer ministro británico, Keir Starmer, ha anunciado este lunes la puesta en marcha de un plan con medidas para reducir la llegada de inmigrantes a su país y para reforzar el control de las fronteras.

En una comparecencia especialmente dura contra la inmigración, Starmer se ha comprometido a reducir "de forma significativa" la llegada de inmigrantes durante este 2025. "Se ha acabado el experimento de las fronteras abiertas", ha dicho en referencia al anterior gobierno conservador, "vamos a hacer lo que nos pide la ciudadanía y a retomar el control de nuestras fronteras".

Debemos evitar ser una isla de extraños y ser una nación que avanza unida

—  Keir Starmer, primer ministro del Reino Unido

Starmer ha dejado también mensajes para las personas migrantes que intentan hacer su vida en el Reino Unido: "Cuando la gente viene a nuestro país debe comprometerse a integrarse, a aprender nuestro idioma, y nuestro sistema debe distinguir de forma clara entre quienes lo hacen y quienes no".

El primer ministro británico cree que esta política, más propia de gobiernos de extrema derecha, casa con el ideario laborista porque, en su opinión, "es lo justo y lo que tenemos que hacer".

Endurecimiento de las medidas contra los inmigrantes

Los inmigrantes deberán ahora residir al menos 10 años en el Reino Unido antes de optar al permiso de residencia definitivo, duplicando el tiempo establecido ahora mismo por la ley.

También el plan incluye un endurecimiento de los exámenes de inglés y un recorte en la contratación de trabajadores extranjeros para el sector sanitario. Esta última medida ha sido criticada por parte por ejemplo de la patronal de las residencias, que cree que puede dejar sin atención suficiente a los mayores que viven en estos centros.

Aumento de las llegadas

Las palabras de Starmer llegan después del aviso electoral de los últimos comicios municipales en los que su partido quedó por detrás de la extrema derecha populista.

También obedecen a los datos de llegadas de inmigrantes irregulares al Reino Unido el pasado año. Más de 35.000 llegaron durante el pasado año a las costas británicas cruzando el Canal de la Mancha, lo que supuso un aumento del 21% con respecto a 2023. También el ritmo de deportaciones aumentó alrededor de un 14% durante el pasado año.