EEUU acepta formalmente el avión ofrecido por Catar como un nuevo Air Force One
Entre los miembros del Congreso crece la preocupación por las presiones de Trump para acelerar las modificaciones de seguridad en la aeronave.

Donald Trump en el despacho Oval / JIM LO SCALZO (EFE)

Madrid
El Gobierno estadounidense ha aceptado este miércoles formalmente el Boeing 747 ofrecido por Catar para ser usado como avión presidencial Air Force One y que ha sido objeto de controversia por los interrogantes que esa entrega suscita en cuestiones de inteligencia y seguridad.
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"El secretario de Defensa ha aceptado un Boeing 747 de Qatar de conformidad con todas las normas y regulaciones federales", declaró el portavoz principal del Pentágono, Sean Parnell, en un comunicado. "El Departamento de Defensa trabajará para garantizar que se consideren las medidas de seguridad adecuadas y los requisitos funcionales de la misión para una aeronave utilizada para transportar al presidente de Estados Unidos", añadía.
Según informaba el New York Times, entre los miembros del Congreso de Estados Unidos existe cierto temor ante una posible presión por parte de Donald Trump hacia la Fuerza Aérea para realizar modificaciones de seguridad en la aeronave "tan rápido que no se incorporen suficientes medidas de seguridad, como sistemas de defensa contra misiles o incluso sistemas para proteger al avión de los efectos electromagnéticos de una explosión nuclear".
"Si el presidente Trump insiste en convertir este avión en un Air Force One reforzado antes de 2029, me preocupan las presiones que pueda tener para recortar gastos en seguridad operativa", señaló la senadora Tammy Duckworth, demócrata por Illinois.
Trump reclama a Sudáfrica una "explicación" sobre la "persecución" y el "genocidio" a los afrikáners
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha asegurado este miércoles ante su homólogo sudafricano, Cyril Ramaphosa, que espera una "explicación" sobre la "persecución" y el "genocidio" al que estarían siendo sometidos la minoría afrikáner después de que Washington concediera el estatus de refugiados a varias familias.
"Hay muchísima gente muy preocupada por Sudáfrica (...) hay mucha gente que se siente perseguida", ha dicho Trump desde el Despacho Oval en un tenso encuentro con Ramaphosa, quien ha recordado a su anfitrión que varios miembros de su delegación son afrikáners, entre ellos el ministro de Agricultura, John Henry Steenhuisen.
"Si hubiera habido un genocidio de agricultores afrikáneres, puedo apostar que estos caballeros no estarían aquí, incluido mi ministro de Agricultura", ha dicho el presidente de Sudáfrica, a quien Trump ha respondido mostrándole un vídeo y recortes de prensa sobre esta supuesta persecución.
"Me gustaría ver dónde es eso, porque no lo había visto", ha dicho Ramaphosa, quien ha explicado que son más personas negras que blancas las que mueren debido al crimen que existe en Sudáfrica ante un Trump que ha insistido en que en el caso de los granjeros afrikáners estos "no son negros".




