Cannes 2025 | Un palmarés justo que realza el imponente cine español
La sorpresa es que el cine de Hollywood no ha tenido ni un solo hueco en el palmarés

Especial Cannes 2025 | Lo mejor y lo peor de la edición de la incertidumbre, la renovación y el cine español
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Cannes
Pocos premios tan merecidos y contundentes como la Palma de Oro para 'Un simple accident', de Jafar Panahi. Una película que reúne dos características importantes para toda obra de arte. Por un lado, la de emocionar y, por otro, la de proponer una crítica a la sociedad actual y un camino para el futuro. El director iraní ha ido adaptando su cine a las circunstancias que la política le ha ido imponiendo.
Primero fue detenido, y su cine, que bebía del tono de su maestro Abbas Kiarostami, del que fue ayudante de dirección, se transformó en una forma de resistencia. Rodó en su casa, puesto que no podía salir. Rodó dentro de un taxi para contar la vida de su ciudad cuando no podía rodar en la calle. Rodó en la frontera cuando tenía prohibido salir del país. Ahora, liberado de la cárcel y de las penas punitivas del régimen, ha rodado mucho más libre. Una libertad que ha usado para reflexionar sobre una idea base en toda convivencia, qué es la justicia y qué es la reparación.
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Un grupo de personajes se encuentran, de repente, al torturador que les amargó la existencia en la cárcel y se debaten qué hacer con él. Una película donde todo está bien. Los personajes, las reflexiones y el tono: del humor, a la tensión y al drama, sin olvidar que el arte es un artefacto político. Nada se puede objetar a un premio como este. Menos si el jurado ha tenido a bien compensar las dos películas de las que más se ha debatido en este festival, como 'Sirat' de Oliver Laxe y Sound of falling de Mascha Schilinski.

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Propuestas que solo un festival como Cannes puede aupar y darles un lugar en la industria. Sin embargo, supo a poco el premio para Bi Gan, dando a entender Juliette Binoche, la presidenta del jurado, que había sido un empeño suyo. Una pena que una propuesta tan rompedora se quede en tan poco. Justo y merecido es el premio de guion para los hermanos Dardenne. Estarán los cenizos que digan que ya tienen muchos. Es cierto, dos Palmas de Oro y un sinfín de galardones en un festival que les arropó y no les ha soltado. Es loable que sigan mirando al mundo con la misma mirada horizontal y crítica, pero que en Recién nacidas nos den algo de esperanza.
Hollywood, la gran olvidada
La sorpresa es que el cine de Hollywood no ha tenido ni un solo hueco en el palmarés. Es verdad que las películas americanas no habían fascinado en exceso, pero en los últimos años, habían rascado algo, aunque fuera un premio de interpretación. Este año había buenos trabajos, como los de Benicio del Toro, en un filme menor como es el de Wes Anderson, o el de Josh O'Connor, por partida doble, y Paul Mescal o Joaquín Phoenix.
Cuando el festival se había obnubilado con estar en los Oscar a toda cosa, el jurado este año se aleja de eso. Veremos si la película iraní puede competir, pues su país no la mandará. Veremos si 'El agente secreto' o 'Sirat', compradas por Neon, alcanzan a llegar al gusto más plano de los académicos americano. Lo más comercial es 'Sentimental Value'. Un drama correcto. No tiene nada malo, las interpretaciones brillan, la historia emociona y Joachim Trier dirige como los ángeles, pero su poso es bastante olvidable.
De momento, las películas salen reforzadas de un festival que, con todas sus contradicciones, sigue mostrando que es el bastión que defiende al cine en pantalla grande, la libertad de los creadores y hasta su integridad física.

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Pepa Blanes
Es jefa de Cultura de la Cadena SER. Licenciada en Periodismo por la UCM y Máster en Análisis Sociocultural...




