"Me sentía el niño de 'El resplandor'": Ponseti y el momento más angustiante de su vida

José Antonio Ponseti, periodista y presentador del podcast 'SER Aventureros', compartió en un reciente episodio una de las vivencias más inquietantes de su vida. Fue durante su juventud, en un viaje académico a Estados Unidos, pero que comenzó con la noticia de lo que podría ser una semana de absoluta soledad en una universidad vacía.

"Yo tengo muchas", comenzó diciendo Ponseti cuando fue preguntado por sus experiencias. "A mí me han ayudado, afortunadamente, muchas veces. Mis ángeles de la guarda han tenido que currar extra en esta vida conmigo, porque ha habido jaleos en donde dices: 'Madre mía, ¿cómo podíamos haber salido de esta?'".

Su llegada a una universidad estadounidense donde debía estudiar gracias a una beca. Se convirtió en un episodio casi cinematográfico. "La vez que mi madre consigue enviarme a Estados Unidos a través de una beca… y se equivocan y me mandan una semana antes. Me mandan una semana antes a la universidad, donde se suponía que yo tenía que estudiar, y cuando llego, me recibe una chica que estaba ahí, en recepción, de casualidad, y me dice: '¿Pero tú qué haces aquí?'".

Ponseti, que en ese momento apenas hablaba inglés, recuerda el desconcierto: "Era un drama. Le digo: 'No, que he venido porque soy tal, del curso tal', y ella me dice: 'Ya, pero es que esto no empieza hasta dentro de una semana'. Y ahora, ¿qué hago?".

El periodista relata con humor que aquella joven se apiadó de él: "Me sentía como el niño de 'El resplandor'. Era una universidad para mil tíos, vacía, y solo yo. Solo yo por los pasillos, solo yo en la bañera, en los baños, solo yo en todos lados".

La situación, que podría haber sido angustiosa para cualquiera, dio un giro inesperado gracias a la empatía de la chica que lo recibió. "Se apiadó de mí. Pensó: 'Pobre, se va a comer aquí el marrón de su vida, o sea, una semana solo aquí… se va a volver loco. Cuando lleguen los demás, este estará colgado en el gimnasio o algo'".

Finalmente, Ponseti fue acogido por la familia de la joven. "Ahí pasé toda la semana. Empecé a conocer San Francisco gracias a ellos, y ya mi vida fue mucho más fácil y mucho más bonita".