"Nadie puede quedar indiferente": Àngels Barceló lamenta el foco del debate migratorio mientras centenares mueren tratando de llegar a España

El mundo entero se conmovió este miércoles ante las imágenes de la llegada de un cayuco al puerto de La Restinga, en El Hierro. Cuando estaba a punto de llegar a su encuentro con el barco de Salvamento Marítimo, la embarcación volcó cuando varios de los más de 150 ocupantes que iban a bordo, trataron de saltar, volteando el cayuco, que quedó completamente del revés.

Ante la atenta mirada del personal de salvamento, de los vecinos que se acercaron a la zona y de la Televisión Canaria, que captaba las imágenes en directo, los migrantes se agarraban a los flotadores, se subieron al casco del barco y trataron de trepar por las cuerdas a la embarcación de Salvamento Marítimo.

Ocurrió lo que tanto temen los servicios de rescate. Y es que cuando los migrantes ven que ya tienen tan cerca la tierra firme, sabiendo que han llegado al final de su larga travesía, se ponen nerviosos y tienden a colocarse a un lado del barco, provocando su volteo. Se trataba de la primera embarcación que llega a la isla, convertida en el epicentro del drama migratorio en Canarias, en 13 días.

La directora de Hoy por Hoy ha comenzado 'El Abierto' lanzando una reflexión sobre el drama que todos pudimos ver en directo y que, desgraciadamente, ocurre con más recurrencia de lo que conocemos. Barceló ponía en valor la celeridad con la que actuaron las autoridades y los equipos de emergencia para evitar que la tragedia fuese todavía mayor.

"Parecía el preludio de una enorme tragedia. Nadie puede quedar indiferente a esa imagen de niños intentando ser rescatados por unos padres o unos adultos que apenas saben nadar", señalaba, a la vez que recordaba que esto, que hemos podido ver en directo a través de la televisión pública, es una situación que se repite pero en medio del mar, quedando en la sombra.

Àngels Barceló destacaba que esta imagen de desesperación contrasta mucho con la realidad de las decenas de miles de personas que, cada año, surcan los mares en condiciones precarias en busca de un futuro mejor. "Contrasta con el endurecimiento de los discursos migratorios en todos los ámbitos políticos y con la lentitud para encontrar soluciones".