La Guardia Civil avisa a los pasajeros del coche: las multas de hasta 500 euros que pueden recibir por infringir estas normas

Madrid

La inmensa mayoría de la población tiene interiorizado que en la carretera los únicos que son susceptibles a recibir una multa son los conductores. Por exceso de velocidad, por no respetar las normas de circulación, por fumar o usar el móvil al volante, y por supuesto, por conducir por encima del límite de alcoholemia. Estas son solo algunas de las muchas infracciones que están reguladas en la normativa de tráfico obligatoria de cumplir.

La Guardia Civil, sin embargo, ha querido recordar recientemente que, aunque la mayoría de las multas van dirigidas hacia los conductores, no son solo ellos los que están el el punto de mira en la carretera. De hecho, los pasajeros también pueden ser multados por la Dirección General de Tráfico (DGT). Lo ha hecho a través de un comunicado emitido en sus redes sociales, con el objetivo de concienciar a todos los ocupantes del vehículo de todas las normas que deben seguir y las consecuencias de no hacerlo.

Y es que los acompañantes están sujetos a la misma normativa de seguridad vial y algunas de las multas más frecuentes que pueden recibir ascienden hasta los 500 euros. Aun así, la cuantía va variando en función de la infracción cometida y la gravedad de la misma. La más grande en este sentido, tiene que ver con tirar las colillas de los cigarros por la ventana. De hecho, la DGT considera una infracción grave arrojar este u otros objetos por la ventana del turismo, pues pone en riesgo la vida de los usuarios en la carretera.

Los pasajeros pueden recibir otras multas de tráfico

Además de la de los 500 euros, que a los conductores les puede suponer una pérdida de hasta 6 puntos, existen otras infracciones también muy frecuentes y que suelen afectar tanto a conductores como a pasajeros por igual. La primera de ellas, en este sentido, tiene que ver con el uso del cinturón de seguridad, un elemento fundamental del coche y cuya desobediencia está tipificada y sancionada.

En concreto, por no llevar el cinturón de seguridad puesto en todo momento, el pasajero puede llegar a pagar 200 euros. De nuevo, se trata de una infracción que la DGT considera grave, porque pone en riesgo la vida de todos los ocupantes del vehículo. En el caso del conductor, no llevarlo cuando es obligatorio puede suponer una pérdida de 4 puntos en el carné de conducir.

Lo mismo sucede con la postura que se adopta en el coche. El organismo, en concreto, rige que la correcta posición es con los pies en el suelo y el respaldo del asiento bien colocado. Esta es la multa con la cuantía más baja de todas las mencionadas, pues oscila entre los 80 y los 100 euros, aunque no es una cuestión menor en términos de seguridad. Y es que en caso de frenazo o colisión tener los pies en el salpicadero o subidos al asiento puede ser extremadamente peligroso, especialmente por el airbag y la fuerza con la que se despliega.

También en la misma línea, la DGT avisa sobre el uso de dispositivos electrónicos durante la conducción. En concreto, esta multa suele ir más dirigida hacia los conductores, aunque un uso indebido y que ponga en riesgo la conducción por parte de los pasajeros también puede llegar a ser una infracción sancionable.