Esta enfermedad será la tercera causa de muerte en España en 2040 y es primordial detectarla cuanto antes: la prueba cuesta menos de un euro

Madrid

El cáncer repite un año más como la primera causa de muerte en España. Según los datos provisionales del informe Defunciones según la Causa de Muerte, publicado recientemente por el Instituto Nacional de Estadística (INE), esta enfermedad fue responsable del 26,6% del total de defunciones que se produjeron en España en el año 2024. Entre los tipos más frecuentes destacan el cáncer de bronquios y pulmón (con 23.239 defunciones) y el cáncer de colon (10.434), siendo las dos que más muertes han provocado a lo largo del año. De esta manera, el cáncer vuelve a ser la primera causa de muerte por delante de las enfermedades del sistema circulatorio, que causaron el 26% de las muertes.

Un informe que deja datos cuanto menos significativos. Entre ellos, destaca hecho de que la enfermedad renal crónica continúa ganando peso entre las principales causas de muerte en España. Un tema sobre el que hemos hablado en el programa A vivir de la Cadena SER, donde el nefrólogo Borja Quiroga nos ha hablado acerca de esta enfermedad y sobre cómo está causando una gran preocupación en el ámbito sanitario: "Es la enfermedad que más sube entre las quince más mortales a un ritmo de un 10% más de mortalidad cada año".

Tras los pasos de la enfermedad renal crónica

En declaraciones a Javier del Pino, el nefrólogo reconoce que tenemos un gravísimo problema de salud pública con esta enfermedad: "Si yo le pregunto a alguien cuál es el cáncer que más miedo le da, probablemente dirá que el de páncreas porque es el más letal. Pues bien, la enfermedad renal crónica mata más que el cáncer de páncreas en España. Pero es que en el año 2040 será la tercera causa de muerte en España. Y el problema de esto es que estos pacientes son los que hay que tratar hoy, no en 2040, cuando desarrollen la enfermedad".

Principalmente porque, a día de hoy, contamos con tratamientos lo suficientemente avanzados como para mejorar la vida de quienes hayan comenzado a padecer esta enfermedad: "Debería ser obligatorio hacer un cribado de riñones porque es muy efectivo. Además, el hecho de saber si los riñones funcionan solo precisa de una analítica de sangre y una analítica de orina".

Una prueba que puede salvar a 60.000 pacientes

En primer lugar, la analítica de sangre se encarga de medir la creatinina, que es una proteína que está en el músculo, llega al riñón y posteriormente se filtra al 99%: "Cuando el riñón no funciona, la creatinina sube en sangre y se detecta fácilmente en la analítica. Una prueba que apenas cuesta dos céntimos de euro y que puede ser de gran ayuda a la hora de identificar esta enfermedad". Por otro lado, el análisis de orina se encarga de medir el nivel de proteínas que se escapan cada vez que vamos al baño: "Otra de las funciones que tiene el riñón es que no deja escapar las cosas buenas de la sangre. Si dejamos escapar proteínas por la orina estamos empezando a tener una enfermedad renal. Es el inicio de muchas enfermedades renales y está pasando desapercibido".

Somos lo que orinamos: la clave de la longevidad está en los riñones

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En declaraciones a la Cadena SER, Borja Quiroga nos explica que medir proteínas en la orina para hacer un mapa completo apenas cuesta 80 céntimos: "Por menos de un euro sabemos si el riñón funciona o no". Por lo tanto, la detección precoz de esta enfermedad podría salvar a 60.000 pacientes que a día de hoy en España requieren de terapia renal sustitutiva: "A día de hoy tenemos tratamientos que, si los administramos de forma precoz, podemos alargar la vida ese riñón más de 25 años". De ahí la importancia de detectar este tipo de enfermedades cuanto antes.