El Nothing Phone (3) pierde sus icónicas luces, pero brilla más que nunca: experiencia tras una semana de uso

Madrid

Hace ya varios años, concretamente el 21 de julio de 2022, la firma británica Nothing lanzaba al mercado su primer teléfono móvil. Tras la gran acogida de sus primeros auriculares, que llamaban la atención por un diseño rompedor, la empresa dirigida por Carl Pei presentaba un smartphone que rompía con todo lo que habíamos visto hasta la fecha a nivel de diseño. Hablamos sobre el Phone (1), un dispositivo que destacaba tanto por su carcasa transparente como por su interfaz Glyph. En un sector cada vez más aburrido en lo que a diseño se refiere, la empresa rompía todos los moldes con un diseño transgresor que le permitió permanecer en el imaginario colectivo de los amantes de la tecnología.

A partir de este primer modelo surgieron otros como el Phone (2) o el Phone (3a) que pudimos probar durante estos últimos meses. Teléfonos móviles muy diferentes en lo que a diseño se refiere, que se caracterizaban por este juego de luces tan peculiar. Pero, tres años después de este diseño revolucionario, Nothing ha decidido dar un paso más adelante con el Nothing Phone (3). Un teléfono móvil que prescinde de aquella interfaz que funcionó a las mil maravillas como carta de presentación, pero que incorpora grandes novedades con las que la compañía da un paso adelante sin perder este carácter rebelde. Estas son nuestras conclusiones del teléfono tras una semana de uso:

Pierde sus luces, pero brilla con luz propia

El diseño del Nothing Phone (3) vuelve a ser uno de sus puntos fuertes. A simple vista nos recuerda a los presentados años atrás. Principalmente por esa trasera transparente tan característica de los móviles de Nothing que nos permite ver el armazón que compone el dispositivo. A pesar de que pierde su icónico sistema de luces, el teléfono móvil gana una pantalla circular compuesta por LEDs a la que han bautizado como Glyph Matrix. Un accesorio, sobre el que hablaremos más adelante, que nos dará mucho juego a lo largo de la review, tal y como podrás leer próximamente.

Pero esto no es lo único que nos llama la atención del diseño. En una era en la que las compañías apuestan por módulos fotográficos simétricos y perfectamente encajados en la trasera del teléfono móvil, Nothing vuelve a seguir su propio camino con una configuración completamente asimétrica. Junto al anteriormente citado Glyph Matrix nos encontramos un total de tres cámaras y un flash LED que encajan a la perfección dentro del caos.

Por lo tanto, pierde sus icónicas luces, pero mantiene su espíritu rebelde. En lo que respecta a la construcción del teléfono móvil, la compañía ha vuelto a apostar por componentes premium como una trasera de cristal templado y un marco de aluminio reciclado que le da ese toque premium tan característico de los móviles de Nothing. Mientras tanto, en la frontal nos encontramos con un cristal Gorilla Glass Victus 2 que protege la pantalla de golpes fortuitos.

Las dos pantallas del Nothing Phone (3)

¿Qué más podemos decir sobre la pantalla del nuevo teléfono móvil de Nothing? En esta ocasión, la compañía ha apostado por un panel Amoled de 6,67 pulgadas con resolución Full HD+ y tasa de refresco de 120 hercios. Una configuración que ya hemos visto en otros teléfonos móviles de gama alta que hemos probado a lo largo de este año, que funciona muy bien tanto en interiores como en exteriores. A pesar de que tiene un brillo pico de 4.500 nits, por debajo de su competencia directa, durante esta semana no hemos tenido ningún problema a la hora de interactuar con nuestro teléfono móvil en condiciones de alta luminosidad como, por ejemplo, en un día de playa.

Y pasamos de la pantalla delantera a la trasera, porque este teléfono móvil cuenta con una pantalla monocromática compuesta por LEDs la mar de llamativa que se convierte en el gran reclamo de este smartphone. Hablamos sobre la Glyph Matrix que sustituye al icónico juego de luces de Nothing. Una tecnología que nos permite mostrar patrones de luz mucho más complejos y dinámicos que las luces que pudimos ver en anteriores modelos. Desde notificaciones personalizadas hasta animaciones, widgets visuales e incluso pequeños minijuegos.

Puede que a simple vista parezca un gadget meramente decorativo, pero lo cierto es que es más útil de lo que pensábamos inicialmente. La pantalla monocromática puede mostrarnos la hora que es, las últimas notificaciones que hemos recibido en nuestro teléfono móvil o incluso el porcentaje de batería que le queda. Pero no solo eso. Esta tecnología incluye un sinfín de juegos y aplicaciones, que se irá ampliando los próximos meses, entre los que destaca el mítico 'Piedra, papel o tijera', la posibilidad de girar una botella o usar la pantalla a modo de espejo. Para interactuar con esta pantalla tan solo tendrás que pulsar el botón, situada en la parte derecha del teléfono móvil, con el que activaremos el modo Glyph y la animación que hayas configurado.

Un procesador que puede con prácticamente todo

El Nothing Phone (3) incorpora el procesador Snapdragon 8s Gen 4. Una versión más equilibrada del Snapdragon 8 Gen 3 que hemos podido probar en otros modelos de gama alta que, sin embargo, rinde fenomenal en el día a día. Si a esto le sumamos la memoria RAM de 12 GB y el sistema operativo Nothing OS, optimizado expresamente para este teléfono móvil, la experiencia mejora todavía más. Durante esta primera semana de uso, la experiencia ha sido completamente fluida tanto a la hora de navegar por las distintas aplicaciones como cuando hemos jugado a algunos de los videojuegos más exigentes del mercado.

Para esta prueba nos hemos descargado el Genshin Impact y el Call of Duty: Mobile y la respuesta del teléfono móvil ha sido notable, incluso con la configuración gráfica óptima. Sí que es cierto que se pueden registrar algunas caídas puntuales de FPS en el Genshin Impact, especialmente en zonas de mucha carga, pero la experiencia de juego es fluida. También en el Call of Duty, donde estamos hablando de una experiencia casi perfecta con los gráficos al máximo.

Uno de los grandes puntos a favor de este procesador es que mejora tanto en eficiencia energética como en capacidades de inteligencia artificial. Si a esto le añadimos que la batería cuenta con 5.150 miliamperios, podremos pasar un día o incluso un día y medio, incluso en días de mucha actividad. Por otro lado, el Nothing Phone (3) cuenta con carga rápida de 45 vatios, con lo que se reducen considerablemente los tiempos de carga.

A mejorar: el apartado fotográfico

Por último pasamos al apartado fotográfico del teléfono móvil, donde nos encontramos con una configuración de triple cámara compuesta de un sensor principal de 50 megapíxeles, una ultra gran angular también de 50 megapíxeles y un sensor de profundidad. En condiciones de buena luz, el sensor principal se comporta de forma notable. No es la mejor cámara que hemos probado este 2025, pero sí que es cierto que ofrece imágenes nítidas y unos colores naturales perfectas para el día a día.

El Nothing Phone (3) también se comporta bastante bien en el modo retrato. Capta hasta el más mínimo detalle del objeto principal y el efecto desenfoque resulta bastante natural. Donde sí que se queda algo atrás es en las fotografías tomadas con el ultra gran angular. Tras realizar varias pruebas, consideramos que la calidad de imagen se queda algo atrás en comparación con los otros dos sensores y que no refleja los colores igual de naturales que la cámara principal.

Por último, y en lo que respecta al apartado de vídeo, el teléfono móvil permite grabar a 4K a 60 fps. El resultado es bastante bueno, pero sí que es cierto que ganaría mucho más si tuviera algo más de estabilidad. En resumidas cuentas, el apartado fotográfico es el gran reto de Nothing de cara a su próximo teléfono móvil.

Conclusiones

Por lo tanto, el Nothing Phone (3) supone un gran paso adelante para una compañía que ya está lista para plantarle cara a los grandes cocos del mercado. El teléfono sigue siendo uno de los más atrevidos a nivel de diseño, con características tan sorprendentes como el Glyph Matrix, pero también es una gran opción en lo que a usabilidad se refiere. Es un teléfono móvil muy interesante a nivel de rendimiento y también de autonomía, todo lo que el usuario medio busca a la hora de comprarse un móvil de primer nivel (a la venta por 799 euros).

Sí que es cierto que se queda todavía un poco atrás en su apartado fotográfico. También en el sonoro, donde consideramos que tiene mucho que mejorar de cara a futuros modelos. Pero, en líneas generales, la experiencia de uso con el teléfono móvil es una gozada.