El octavo arte
Rosa Moreno nos hace entender la alta costura como un estilo de arte propio

“Un buen diseñador debe ser arquitecto de la forma, pintor para el color, músico para la armonía y filósofo para la medida."
— Cristóbal Balenciaga
Desde finales de los años 70 la moda entra en los museos, creándose exposiciones de los principales creadores en centros de todo el mundo. Actualmente son muchos los museos dedicados en exclusiva a mostrar prendas con interés histórico y etnográfico. Un ejemplo: Giacomo Balla creó trajes y complementos dentro de la vanguardia del futurismo, y Sonia Delunay, fundadora del simultaneísmo, inventó los vestidos poema en colaboración con Tristán Tzara.
Artistas muy conocidos del siglo XX han construido su imagen a través de la moda con estilos muy reconocibles, Picasso con sus camisetas a rayas, Warhol con su “disfraz” (llevaba peluca y looks monocromos) Frida Kalho con sus looks de indumentaria tradicional mexicana y sus tocados de flores… Pueden considerarse una prolongación de su mismo arte, como sacados de sus mismas pinturas.
La expresión del arte
La moda tiene un componente artístico muy importante, pues se desenvuelve en el terreno de lo visual pero no todos los diseñadores se consideran artistas. Coco Chanel, por ejemplo, se mofaba de los creadores considerados artistas, pues ella se identificaba más con el papel de modista. De hecho, tuvo una gran rivalidad con Elsa Schiaparelli, diseñadora surrealista por excelencia autora del tocado zapato y competidora directa de su firma.
En cualquier caso, no todas las vertientes de la moda pueden (o deben) considerarse arte, pues las predas de "fast fashion" consisten en la creación de fichas técnicas para producir prendas en cadena. La alta costura es la forma más similar al circuito del arte pues cada pieza es única y a medida, trabajada con materiales de lujo y hecha a mano sin utilización de procesos industriales. Son prendas que suelen modelarse sobre maniquí, casi como esculturas, en lugar de patronarse en plano, que es el proceso habitual.




