¿Qué está pasando en la ONU?: "La retirada de fondos de EEUU no puede contagiarnos a los demás países"

La condena a Israel y el grito de auxilio de Palestina ha atravesado esta Asamblea General de la ONU, que celebraba los ochenta años del nacimiento de Naciones unidas. Una organización que se creó para coordinar al mundo, a los países, para conseguir acuerdos voluntarios entre estados, dejando a un lado las imposiciones. Pero los equilibrios de poder de entonces no son los de hoy, y esto genera un poco de impotencia.

En este contexto, Aimar Bretos y el equipo de Hora 25 se ha querido preguntar cómo se puede mejorar la ONU para que sea más eficaz en el mundo actual. Y para ello, ha invitado a Arancha González Laya, exministra de Asuntos Exteriores y actual decana de la Escuela de Asuntos Internacionales de París de Sciences Po, y a Agustín Santos, que fue Embajador de España ante Naciones Unidas y ahora es diputado y secretario de internacional de Sumar.

"Naciones Unidas son la suma de las voluntades de un conjunto de países en el mundo. Somos el resultado de nuestro estado de salud, y el de hoy no es muy bueno", ha asegurado González Laya. La Organización, ha explicado, tiene dos problemas fundamentales. El primero: el sistema de cooperación internacional. "El reparto de poder en el mundo es distinto a cuando se creó. Ahora hay países empoderados política, económica e ideológicamente y que quieren ir por su cuenta", ha reflexionado. Y el segundo tiene que ver con la pérdida del poder hegemónico de Estados Unidos: "Hasta ahora Estados Unidos aceptaba ser el garante de que el sistema funcionara, pero ahora ha abdicado de esta responsabilidad. Y no solo eso, si no que entiende que hay que demoler este sistema porque no le sirve", ha detallado la exministra.

Santos ha explicado los mecanismos institucionales que él vivió desde dentro: "En la reunión semanal de los jefes de misión de la Unión Europea, la presión que venía desde Bruselas unificaba y los intereses nacionales dividían. Por ejemplo con Hungría, había que hacer declaraciones diciendo que no era la Unión Europea, si no, los 27 países de la UE, menos Hungría los que apoyamos esto", ha explicado.

Y en base a esto, el actual secretario general de Sumar también ha contado que, en 2019, en una conversación con Guterres con los embajadores europeos, les explicó cuál era el principal problema al que se enfrentaban: "la división en bloques de la organización que la bloquee", ha asegurado. "El papel de la Unión es esencial para evitarlo. Si es capaz de tender puentes con el Sur Global tendremos posibilidades de evitar una polarización completa, que es lo que ha ocurrido estos dos años", ha lamentado.

Para González Laya, "la Asamblea General ha sido muy importante" en lo que respecta a la situación en Gaza: "La Unión Europea ha sido líder en decir que debemos acabar con la masacre, porque esto es vulnerar los derechos humanos", ha insistido. El hecho de no haberse pronunciado tan vehementemente en todo este tiempo ha sido, para Laya, "una herida", y ha llevado a la organización a una "pérdida de credibilidad como defensora de ciertos valores". "Los ciudadanos europeos no entienden que no reaccionemos ante la terrible masacre que esta teniendo lugar en Gaza, pero tampoco lo entienden los países terceros", ha sentenciado.