Carles Francino: "¿Informar sobre la desigualdad es demagogia?"
El periodista reflexiona sobre el uso político de la demagogia y defiende que visibilizar la brecha social es informar, no manipular
Carles Francino ha puesto sobre la mesa una pregunta incómoda: ¿es demagogia informar sobre la desigualdad? En un momento en el que el debate político se ha "encanallado hasta niveles estratosféricos", el periodista ha querido detenerse en el uso y abuso de conceptos como la demagogia, convertidos en armas arrojadizas en el debate público.
"La demagogia es una estrategia para conseguir poder político apelando a prejuicios, miedos y esperanzas", ha recordado Francino. "Entonces yo pregunto: si destacamos como noticia que los directivos del IBEX cobran 55 veces más que el promedio de sus empleados, ¿estamos haciendo demagogia?"
La respuesta, para él, es clara: no. "Yo creo que estamos informando. Y que además debemos poner esos datos en el contexto de que más de un 20% de españoles viven por debajo del umbral del riesgo de pobreza", añadió. "La desigualdad es el gran problema que amenaza nuestra convivencia".
Francino enumeró los ámbitos donde esta desigualdad se manifiesta: los salarios, la educación, la sanidad, el acceso a la vivienda. Y citó el chiste de El Roto publicado en El País, que habla de "la dictadura del propietariado", como ejemplo de cómo el humor también puede señalar las fracturas sociales.
En esa misma línea, el periodista mencionó el artículo del filósofo Daniel Innerarity publicado este martes en El País, titulado La fascinación de lo peor, donde se advierte del auge de un poder autoritario que busca atemorizar a la ciudadanía.
"Describir la realidad como si estuviéramos al borde del abismo, en vez de hablar de las clases vulnerables, implica minusvalorar las diferencias que nos hacen frágiles ante las crisis", leyó Francino.
Su conclusión fue rotunda: "Eso es donde deberíamos poner el foco: en la desigualdad y no dejarnos distraer con ruido y con chorradas".
