Las malas noticias para Trump que esconden las urnas: los jóvenes y los latinos

Madrid

Este miércoles 5 de noviembre se cumple un año de la victoria de Donald Trump en las elecciones presidenciales de Estados Unidos de 2024, victoria que supuso su retorno a la Casa Blanca. El martes Trump no estaba en las papeletas y, sin embargo, las papeletas se volvieron contra Trump.

Los demócratas tuvieron la habilidad de convertir las múltiples citas electorales de ayer (alcaldía de Nueva York, gobernadores de Virginia y Nueva Jersey o el referéndum para redibujar el mapa electoral en California) en un voto de protesta contra el presidente.

La jornada electoral del martes deja varias noticias esperanzadoras para los demócratas y preocupantes para los republicanos de cara a las elecciones de mitad de mandato que se celebrarán dentro de justo un año, el 2 de noviembre de 2026.

Ese día se renovarán los 435 escaños de la Cámara de Representantes y un tercio de los 100 asientos del Senado. Los demócratas tienen ahora renovadas esperanzas de recuperar la mayoría en la Cámara de Representantes, que ahora controlan los republicanos por 220 a 215 escaños. A priori, será mucho más difícil que recuperen el Senado, donde ahora mismo hay una mayoría republicana de 53 a 47.

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Lo preocupante para Trump

Las malas noticias para los republicanos no terminan con las rotundas derrotas en Nueva York, Virginia, Nueva Jersey o California. Lo preocupante para Trump, el movimiento MAGA y el partido republicano está en cómo se han producido esas derrotas.

Las elecciones locales o estatales suelen tener una participación muy inferior a las presidenciales. Pero esta vez los demócratas han conseguido movilizar a su electorado y acercarlo a las cifras de participación de unas presidenciales.

En Nueva York, por ejemplo, más de dos millones de ciudadanos han acudido a las urnas para elegir a un socialista y musulmán como alcalde. No se superaba esa cifra de dos millones de votos en unas elecciones a la alcaldía de la ciudad desde 1969. Más de la mitad de los votos han sido para Zohran Mamdani, el rupturista candidato demócrata, que centró su mensaje en facilitar el acceso a la vivienda y aliviar el coste de la vida.

Donald Trump ganó hace un año porque focalizó su campaña en la economía y la contención de los precios y consiguió movilizar a una parte importante del voto latino, negro y joven hacia el lado republicano. Este martes, esos grupos de votantes han virado de nuevo con fuerza hacia el lado demócrata.

Por ejemplo, el voto latino a los demócratas aumentó nueve puntos en Nueva Jersey y cinco en Virginia respecto a las presidenciales de 2024, según Voter Poll. Hay un condado de Nueva Jersey, Passaic, que ejemplifica a la perfección lo que ha pasado. En ese condado el 43% de la población es de origen latino. Trump ganó allí hace un año por tres puntos. La candidata demócrata a gobernadora arrasó anoche por más de 15 puntos de ventaja.

Giro del voto joven

El giro del voto joven ha sido aún más contundente que el latino. En Nueva York, Zohran Mamdani ha conseguido una victoria aplastante entre los menores de 45 años. En esa franja de edad, el candidato demócrata se ha impuesto a sus rivales por 44 puntos de ventaja, según la NBC. Sin embargo, por encima de esa edad, Mamdani ha perdido por más de 10 puntos con Andrew Cuomo.

Esa tendencia ha sido consistente también en Virginia, Nueva Jersey y California que, si bien es verdad que son estados eminentemente demócratas, la diferencia del voto de los menores de 30 años en favor de los demócratas ha sido cercana a los 40 puntos. Hace un año, Trump sólo perdió entre los jóvenes por cinco puntos frente a la candidata demócrata Kamala Harris.

Si esta tendencia se mantiene en las elecciones de mitad de mandato que se celebrarán dentro de un año, los republicanos estarán en apuros. La victoria de Trump en 2024 se basó en ampliar su espectro electoral y dejar de depender únicamente del votante blanco y de clase trabajadora. Si el voto latino, el voto negro y, especialmente, el voto joven dan la espalda a los republicanos como sucedió ayer, su derrota está asegurada.

Donald Trump ha escrito esta madrugada en su red social que las razones de la derrota republicana en las elecciones de este martes son dos: que él no estaba en las papeletas y que el Gobierno lleva cerrado 36 días, un nuevo récord en la historia del país, superando los 35 días de 2019, también con el magnate republicano en la Casa Blanca.

Es verdad que Trump no estaba ayer en las papeletas. Los ciudadanos no podían votar a Trump, pero si podían votar contra Trump. Y fue lo que hicieron.