Así será el futuro museo de Cuelgamuros
El centro de interpretación del proyecto seleccionado para la resignificación del Valle contempla la posibilidad de trasladar la puerta principal que da acceso a la Basílica

Propuesta de entrada a la Basílica de Cuelgamuros del proyecto seleccionado para la resignificación

El proyecto La base y la cruz, seleccionado por el jurado para la resignificación del Valle de Cuelgamuros dentro del concurso impulsado por el Gobierno, además de los cambios arquitectónicos y los nuevos escenarios que propone para la remodelación de este lugar histórico, contempla la puesta en marcha de un centro de interpretación que servirá para entender el pasado y el presente de este enclave, según los detalles de la propuesta a los que ha tenido acceso la SER. En realidad es un museo que se construirá desde cero y que constará de una exposición permanente y una temporal.
La exposición permanente consta de seis bloques temáticos. El primero, sobre la España enfrentada, que mostrará el desarrollo de la Guerra Civil, el trasfondo político y social, los combates y bombardeos, y su conexión con la guerra mundial, a través de un gran audiovisual con pantalla curva y proyecciones en el suelo. El segundo bloque versará sobre la historia del monumento que erigió el régimen franquista. En ese espacio habrá globos de luz y otros recursos expositivos con frases sobre vencedores y vencidos y datos de fallecidos, fusilados, exiliados, encarcelados, así como número de campos de concentración y de fosas comunes. Este apartado se acompañará con un paseo aéreo por una maqueta que muestra la sierra de Madrid y su entorno natural.
El tercer bloque narrará como se financió y se ejecutó esta obra monumental a través de la exposición de costes, gastos y aportaciones económicas junto con recortes de prensa y anuncios para aportar a la causa. Un gran panel gráfico exhibirá las fotos de los presos que fueron empleados para la construcción; también se utilizarán audios de testimonios de obreros, presos, guardias y capataces. El cuarto bloque se centrará en los recursos artísticos del Valle, como la cruz y las esculturas de Ávalos. En el bloque quinto se hablará de la arqueología y la vida en los penales de San Román y Banús, con objetos cotidianos, herramientas e incluso juguetes recuperados.

Plano aéreo del proyecto ganador para la resignificación de Cuelgamuros

Plano aéreo del proyecto ganador para la resignificación de Cuelgamuros
El último bloque, el sexto espacio, será el dedicado expresamente a la memoria histórica y la memoria democrática. Paneles gráficos y pantallas mostrarán imágenes de la inauguración de Cuelgamuros y harán alusión al cambio de mentalidad por la presión internacional. Un gran audiovisual panorámico explicará las leyes de Memoria Histórica y Memoria Democrática. Se expondrán recortes de prensa sobre varios momentos históricos, como el enterramiento de Franco en la Basílica, el fin de la dictadura, el inicio de la transición democrática, la exhumación del dictador y el nuevo proyecto de resignificación del Valle.
Tras la exposición permanente el visitante atravesará otro espacios con entrantes y salientes que servirá para albergar exposiciones temporales de temáticas relacionadas con la convivencia, la constitución, la democracia, la transición, los derechos humanos, el arte comprometido, la arquitectura monumental y el paisaje. Este espacio de exposiciones temporales encamina al visitante hacia el interior de la Basílica.
Cambios en la Basílica
Aunque los cambios dentro del templo son mínimos, el proyecto propone una nueva forma de entrar a la Basílica, como una especie de puerta abierta con dos ámbitos: in memoriam, para acceder desde el patio con un lucernario puntual que evoca los recuerdos, y preámbulo del segundo ámbito, un espacio soterrado con una gran escalinata de subida hacia el templo. Dos bancos corridos a lo largo de las fachadas interiores permitirán la espera antes y después de la visita al templo. En ese umbral el proyecto propone colocar la puerta principal actual, que será trasladada al frente interior que da acceso al templo. Propone también despojar las fachadas interiores y la bóveda de las piezas ornamentales actuales para recuperar la presencia de la roca perforada que el proyecto inicial preveía.




