El Banco de España alerta de que la brecha entre los salarios y vivienda puede generar vulnerabilidades en los hogares más pobres

Madrid

Los precios de la vivienda han intensificado su ritmo de crecimiento y están subiendo por encima de los salarios. Esta diferencia, que entre 2021 y 2024 se mantuvo estable porque la contención de los precios de la vivienda fue acompañada de una recuperación de la renta de los hogares, ha comenzado a ampliarse en los últimos meses.

Es el diagnóstico que ha hecho el Banco de España en su Informe de Estabilidad Financiera de otoño. Aunque la "situación financiera de los hogares es muy sólida" y se ha mantenido "estable en niveles favorables", el organismo detecta que "se observa un aumento de la brecha (9pb) entre el aumento general de los precios y los precios de la vivienda" desde la publicación de su último informe en primavera. Esa brecha, sin embargo, está en un nivel similar al registrado en 2004 y es muy inferior a los valores máximos observados a principios de 2008.

El acceso a la vivienda está yendo acompañado de la concesión de crédito y "más del 60% del gasto agregado en consumo se concentra en familias con deudas pendientes", indica el supervisor.

"Una carga financiera excesiva tiende a reducir el gasto en consumo, especialmente en situaciones adversas como la pérdida de empleo. Esta sensibilidad del consumo ante perturbaciones económicas puede repercutir en otros agentes", explica el Banco de España en su diagnóstico sobre los riesgos para la estabilidad financiera.

Sin síntomas de burbuja inmobiliaria

"No estamos en un momento que se pueda calificar de burbuja", señala el Banco de España. "No hay relajación de criterios a la hora de conceder crédito y, por tanto, hay tranquilidad desde la perspectiva de la estabilidad financiera".

Los precios han intensificado su ritmo de crecimiento (12,5% en el primer semestre de 2025), aunque el supervisor detecta una “desaceleración” en las compraventas.