Las ideas de Kast: del respaldo a Pinochet a la admiración por Trump

Si uno escucha los mensajes del nuevo presidente electo chileno, José Antonio Kast, parece que oyera la versión en español de Donald Trump. Sus proclamas se han centrado en prometer que hará a Chile "más grande", en prometer una vigilancia mayor de las fronteras, más acción policial y una deportación masiva de inmigrantes irregulares. Ya en su día calificó la victoria electoral de Trump como el triunfo "de la libertad y el sentido común".

Con Kast por tanto se suma otro país a la línea ultraconservadora que representa el argentino Javier Milei o el expresidente brasileño Jair Bolsonaro, llevando a América Latina cada vez más hacia la extrema derecha.

Simpatizante de Pinochet

Kast ha evitado en campaña mostrarse como un heredero directo del dictador Augusto Pinochet, pero su larga trayectoria política deja varios momentos en los que no ha escondido sus simpatías por el genocida. Ya en 1988 apoyó la continuidad del régimen en el plebiscito nacional convocado ese año y en 2017 aseguró que votaría por Pinochet si tuviera oportunidad.

Kast ha llegado a negar la persecución de opositores políticos durante la dictadura en una comparecencia con periodistas extranjeros en 2021. Además, nunca ha definido como dictadura al período de mando de Pinochet, sino que lo llama "gobierno militar" que, en su opinión, "llevó adelante un proceso contemplado en una Constitución".

Ciertos aspectos del gobierno militar son rescatables

—  Declaraciones de José Antonio Kast a Chilevisión en 2021

En los últimos años ha intentado suavizar estas posiciones y se ha proyectado como un defensor de la democracia a pesar de representar a un partido que fue fundado por antiguos miembros de una formación colaboradora del régimen de Pinochet.

Entre sus matizaciones ha incluido declaraciones en las que ha dicho que es consciente de que el gobierno de Pinochet fue "autoritario" y que en él se violaron los derechos humanos, aunque nunca ha llegado a condenarlo públicamente.

Ideario trumpista

No ha escondido tampoco su admiración por Donald Trump y es uno de los firmantes de la Carta de Madrid, el documento impulsado por la extrema derecha española en el año 2020 para enlazar a las formaciones ultraderechistas de América Latina.

La campaña de Kast se ha centrado en la economía, la seguridad y el control migratorio, los pilares fundamentales del trumpismo que poco a poco va ganando territorio político en el mundo. El presidente electo se ha mostrado siempre contrario al aborto y al matrimonio entre personas del mismo sexo, y es un firme defensor de reforzar el papel represivo de las fuerzas de seguridad.

También se ha mostrado partidario de cavar una zanja de separación en las fronteras de Chile con Perú y con Bolivia. Kast ha anticipado que construirá nuevas vallas metálicas en esas zonas fronterizas en las que instalará decenas de cámaras, sensores electrónicos y radares.

Al igual que Trump, pretende iniciar una política de deportación masiva de inmigrantes mediante la financiación de vuelos de expulsión. Políticas que han recibido ya la bendición desde Washington esta misma madrugada en un comunicado firmado por el Secretario de Estado Marco Rubio: "Confiamos en que bajo el liderazgo de Kast Chile impulsará prioridades compartidas", reafirma el representante de la política exterior estadounidense.

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