Los libros que han marcado este 2025
Repasamos todo lo que ha dado de sí el año literario y descubrimos los mejores títulos recomendados por la sección de Cultura de la Cadena SER
Los libros de 2025 / CEDIDA
Si en el mundo del cine el año ha estado marcado, in extremis, por esa absorción de Warner por parte de Netflix, en el ámbito literario el mayor debate del año lo centraba la retirada de las librerías de El Odio, de Luisgé Martín. Un libro donde el autor indagaba en la mente de un asesino, José Bretón, que mató a sus hijos en un caso de violencia vicaria y al que el autor entrevistó en la cárcel. La denuncia de la madre de los niños, Ruth Ortiz, paralizó su publicación, y solo unos pocos ejemplares habían llegado a las redacciones de periódicos. Tras varias semanas de tensión mediática y judicial, finalmente, la editorial Anagrama renunció de manera definitiva a la publicación del libro.
El debate sobre la libertad de expresión, la censura o cómo un relato puede perpetuar un caso de violencia de género centraron gran parte del año en lo cultural donde hemos despedido a nuestro último premio Nobel, Mario Vargas Llosa y asistido a una efeméride que nos ha permitido volver a hablar de memoria histórica, los 50 años de la muerte de Franco.
Varias biografías y libros sobre el dictador han llegado a las librerías, entre ellas, la de Jesús Ruíz Mantilla y la de Julián Casanova, que ha intentado psicoanalizar al dictador y su contexto. Con la muerte de Franco, recuerda el escritor y librero Sergio Bang, no llegó la democracia ni la transición, fueron años muy duros, como recuerda en Venimos del fuego, su primera novela, sobre las librerías atacadas aquellos meses.
De memoria habla uno de los libros del año, Mauro, de Mikel Guerendiain, una crónica ficticia sobre la huida de 800 presos ocurrida en 1938, cerca de Pamplona, y la caza franquista que cayó sobre ellos. Contado a través de distintos personajes que participaron es un relato poliédrico de un hecho histórico poco conocido.
El de Guerediain es, además, uno de los debuts del año, que ha habido unos cuentos muy reseñables, como el de Jonathan Arribas con Vallesordo, pero sobre todo los de Laura G Vela, con Seismil, y Lucía Solla con Comerás Flores. Estas dos autoras hablan, de forma diferente, de la violencia machista, en un relato íntimo.
En el caso de Laura G Vela, la madrileña cuenta, en un breve relato, un episodio que marcó su infancia, una violación por parte de un hombre de 40 años que conoció por Internet y la extorsionó. Años después, en unos cursos de literatura, se lanzó a contarlo y lo ha publicado en la Editorial Niños Gratis. Solla, por su parte, novela las muchas formas, a veces camufladas bajo la etiqueta del amor romántico, que puede adoptar el maltrato psicológico dentro de la pareja. Y encima escrito con lirismo, precisión y autenticidad.
En 2025 hemos seguido constando, algo que ya venían demostrando en años anteriores, la fuerza y la originalidad de los autores latinoamericanos. Juan Gabriel Vásquez nos dejó boquiabiertos con Los nombres de Feliza, donde funde la biografía, la autobiografía, la realidad y la imaginación para entregar al lector una ficción sobre un personaje real.
La ficción le sirve a Daniel Saldaña para enmascarar algunas de sus vivencias como hijo de dos activistas de izquierdas en el México de Tlatelolco. Lo hace en Los nombres de mi padre, una indagación sobre la identidad, que rompe etiquetas, moldes, y que consigue firmar el mejor homenaje a Pedro Páramo posible. Pedro Mairal, que ahora publica con Destino, volvió a la novela en 2025 con Los nuevos, retrato brillante y conmovedor del paso de la adolescencia a la edad adulta
Cristina Rivera Garza nos sorprendió con sus relatos protagonizados por mujeres que tratan de sobrevivir a contextos difíciles en Terrestre, y Samantha Schweblin es de esas autoras que consigue que los monstruos y lo cotidiano vivan en tensión y armonía, como reflejan sus relatos en El buen mal. Se estrenó en España, Cometierra, el fenómeno de la argentina, Dolores Reyes y Mariana Enríquez nos introdujo en una atmósfera inquietante en Cómo desaparecer completamente, que da voz a los olvidados que viven en los márgenes.
El curso nos ha dejado también la vuelta de veteranos en buena forma. Para empezar, fue toda una sorpresa volver a leer otra aventura de El Capitán Alatriste, de Arturo Pérez-Reverte. Antonio Muñoz Molina nos enseñó la belleza de volver a leer El Quijote; Enrique Vila Matas nos llevó por infinidad de paseos, caminos y referencias en Canon de cámara oscura; Cristina Fernández Cubas con Lo que no sé ve y Arundathi Roy contó, sin ánimo de venganza, la vida de su madre y la suya, al tiempo que retrataba la historia reciente de su país, La India.
Isaac Rosa, Anna Penyas, Blanca Lacasa y Sara Mesa nos metieron a su manera en el relato de las cuitas cotidianas, y cómo lo íntimo siempre acaba perjudicado por lo político. En Las buenas noches, Isaac Rosa hace algo parecido a lo que intenta Anna Penyas en su cómic En Vela, ahondar en las causas sociales y económicas del insomnio y cómo destroza todo. Blanca Lacasa habla también de precariedad, de modos de vida y de amores a primera vista. Sara Mesa nos mete de lleno en la vida de una funcionaria que descubre que la inercia del sistema, el no quejarse, el no significarse es lo único que hace la gente para sobrevivir. Y así nos va.
"La poesía es el lenguaje alternativo al poder y los poetas también tienen hambre, hay que reconocer y remunerar el trabajo artístico", apuntaba Yolanda Castaño, Premio Nacional de Poesía 2023, en su primer ensayo: Economía y poesía: rimas internas.
En poesía, hemos sufrido con La habitación de las ahogadas, de Alana S. Portero. Un conjunto de poemas revisados con los años, un testamento oscuro y triste al que pensó no sobrevivir, nos decía. Sobrecogedor, como lo son también los poemas amarillos de Marta Sanz o la poesía de la Premio Nobel de Literatura en 2024, Han Kang, en Guardé el anochecer en el cajón.
Volviendo al ensayo, hemos entendido cómo sigue funcionando la clase en todo lo que hacemos y decimos, hasta en el ámbito cultural, gracias a Nadie me esperaba aquí, de Noelia Ramírez. Uno de los grandes ensayos, por su análisis de la sociedad española de los últimos años y por proponer una nueva teoría, la de la vertiente revolucionaria del apocalipssis, es La fiesta del fin del mundo, de Natalia Castro Picón. En medio del debate sobre la reducción de jornada, que no parece llegar, Juan Evaristo Valls ha publicado un bello ensayo en favor del derecho al descanso, a parar, a tener vacaciones, a trabajar menos. Con este propósito dejamos las listas de lo mejor del año.
La lista de Dani de la Fuente, La Hora Extra
Confeti, de Jordi Puntí (Anagrama)
El director, de Daniel Kehlmann (Random House)
Luna Park, de Marina Perezagua (Páginas de Espuma)
Casas limpias, de María Agúndez (Temas de hoy)
Las buenas noches, de Isaac Rosa (Seix Barral)
Venimos del fuego, de Sergio Bang (Plaza y Janés)
La habitación de las ahogadas, de Alana S. Portero (La Bella Varsovia)
El buen mal, Samanta Schweblin (Seix Barral)
Oposición, de Sara Mesa (Anagrama)
El imperativo categórico, de Victoria Szpunberg (Punto de vista editores)
Bonus: Leche cruda, de Ángelo Néstore (Reservoir Books) y Comerás flores, de Lucía Solla Sobral (Libros del Asteroide)
La lista de Raquel García
El verano en que mi madre tuvo los ojos verdes, de Tatiana Țîbuleac (Impedimenta)
Criaturita, de María Bastarós (Seix Barral)
Un largo camino, de Abdulrazak Gurnah (Salamandra)
Comerás flores, de Lucía Solla Sobral (Libros del Asteroide)
Morir en la arena, de Leonardo Padura (Tusquets)
Por voluntad propia, de Mathilde Forget (Tránsito)
El accidente, de Blanca Lacasa (Libros del Asteroide)
El Bastión de las Lágrimas, de Abdelá Taia (Cabaret Voltaire)
Huríes, de Kamel Daoud (Cabaret Voltaire)
Crisálida, de Fernando Navarro (Impedimenta)
La Lista de Pepa Blanes, Cultura
Lluvia pequeña, Gareh Greenwell (Random House)
Los nombres de mi padre, Daniel Saldaña (Anagrama)
Oposición, Sara Mesa (Anagrama)
Comerás flores, Lucía Solla (Libros del Asteroide)
Mi refugio y mi tormenta, Arundathi Roy (Alfaguara)
El derecho a las cosas bellas, Juan Evaristo Valls Boix (Ariel)
Seismil, Laura G Vela (Niños gratis)
Los nombres de Feliza, Juan Gabriel Vásquez (Alfaguara)
En Vela, Anna Penyas (Salamandra)
Mauro, Mikel Guerendiain (Los aciertos & Pepitas)
Bonus: el cierre de la trilogía de Leila Slimani, Me llevaré el fuego
La lista de Pepe Rubio, Hoy por Hoy
Mauro, de Mikel Guerendiain (Los aciertos & Pepitas).
Comerás flores, de Lucía Solla (Libros del Asteroide)
Hasta que empieza a brillar, Andrés Neuman (Alfaguara)
El sueño del jaguar, de Miguel Bonnefoy (Libros del Asteroide)
Los nuevos, de Pedro Mairal (Destino)
El verano de Cervantes, de Antonio Muñoz Molina (Seix Barral)
Me casé con un extraño, de Irene Claremont (Residencia de Estudiantes)
El buen mal, de Samanta Schweblin (Seix Barral)
Lo que no se ve, de Cristina Fernández Cubas (Tuquets)
La edad infinita, de Miriam Reyes (Tránsito)
La lista de Antonio Nuño, A vivir que son dos días
Oposición, de Sara Mesa (Anagrama)
Crisálida, de Fernando Navarro (Impedimenta)
El efecto deseado, de Guillermo Alonso (Seix Barral)
Los nombres de Feliza, de Juan Gabriel Vásquez (Alfaguara)
Yo era un chico, de Fer Rivas (Sexto Piso)
Mañana matarán a Daniel, de Aroa Moreno Durán (Random House)
El sueño del jaguar, de Miguel Bonnefoy (Libros del Asteroide)
Lo que no se ve, de Cristina Fernández Cubas (Tusquets)
Las buenas noches, de Isaac Rosa (Seix Barral)
Urraca, Urraquita, Urraquitita, de Jaime Riba (Dos Bigotes)
La Lista de Emma Vallespinós, La Ventana
El jardinero y la muerte, Georgui Gospodinov, (Impedimenta)
Lo que viene después… y que te guste, Abigail Thomas (Errata Naturae)
Astillas, una historia de amor diferente, Leslie Jamison (Anagrama)
Comerás flores, Lucía Solla Sobral (Libros del Asteroide)
Te elige, Miranda July (Ediciones Comisura)
Cuéntamelo todo, Elizabeth Strout (Alfaguara)
Algunos días, Acoidan Méndez (Plasson & Bartleboom)
Oposición, Sara Mesa (Anagrama)
Mi refugio y mi tormenta, Arundhati Roy, Ed. Alfaguara
Los nuevos, Pedro Mairal, Ed. Destino
